LA HABANA, 24 jul (Xinhua) -- La joven selección cubana de béisbol inició con buen paso una serie amistosa de cinco juegos con un equipo universitario de Estados Unidos, que se disputa hasta el próximo domingo 27 en la isla.
En partido celebrado la noche del miércoles en el estadio "Victoria de Girón", de la ciudad de Matanzas --100 kilómetros al Este de La Habana--, el conjunto local venció 4-3, con triunfo para el abridor Norge Luis Ruiz, apoyado en su velocidad y combinación de lanzamientos, y revés para Justin Garza.
Ruiz mantuvo en un puño a los visitantes y solo permitió una carrera y dos inatrapables mientras ponchaba a seis, en los seis capítulos en que actuó.
El cotejo se caracterizó por el bateo oportuno de los cubanos frente al descontrol de los lanzadores norteños, con envíos supersónicos, además de la pobre ofensiva de los visitantes.
"La mayoría de esos hombres todavía se están aclimatando al bate de madera, antes usaban aluminio y la transición no se logra de un día para otro. Tal vez por eso la ofensiva de largo metraje haya estado tan pobre en nuestros partidos", afirmó el manager norteamericano Dave van Horn en conferencia de prensa.
Aun cuando comenzó cediendo por la mínima, el plantel universitario de EEUU demostró que sabe jugar béisbol muy bien.
Los cubanos, por su parte, mostraron debilidad en el pitcheo de relevo, que soportó el único cuadrangular del cotejo conectado por el emergente Chris Okey frente al zurdo Pedro Durán.
A pesar de ello, la tropa del mentor Alfonso Urquiola, sin fogueo internacional, pudo vencer la primera prueba de fuego frente a un plantel que durante el último mes disputó 23 encuentros, válidos para engrasar la maquinaria, mover piezas y probar estrategias.
La escuadra norteña llegó a Cuba tras coronarse en la XXVII Semana Beisbolera de Haarlem, Holanda, donde ganó siete partidos y apenas sufrió una derrota frente a Japón.
Para los cubanos, la victoria en el cotejo inicial reviste mayor importancia pues contribuye a mitigar los desagradables recuerdos de la barrida que sufrieron en el tope del pasado año.
En 2013, durante la serie efectuada en Iowa, Nebraska y Carolina del Norte (EEUU), los caribeños no pudieron con la calidad de los lanzadores estadounidenses, al margen de evidenciar deficiencias en la receptoría, el sistema ofensivo y el pitcheo.
Este jueves, ambos elencos volverán a chocar en el mismo escenario de Matanzas y los tres duelos restantes --del viernes 25 al domingo 27-- tendrán por sede al parque "Capitán San Luis" de Pinar del Río, ciudad ubicada a 165 kilómetros al Oeste de La Habana.
Cuba y EEUU iniciaron las series amistosas de béisbol en 1987, en el estadio "Latinoamericano" de la capital cubana, pero se interrumpieron en 1996 cuando la entidad "USA Baseball" cambió la directiva.
Hasta la fecha, ambas naciones han protagonizado 12 topes de ese tipo y el marcador favorece a los cubanos 34 victorias y 28 reveses.
Para Cuba, el actual encuentro deviene excelente oportunidad para medir el desempeño de figuras jóvenes y sin mucha experiencia en equipos nacionales, de cara al torneo correspondiente a los Juegos Centroamericanos y del Caribe que se efectuarán en la ciudad mexicana de Veracruz, del 14 al 30 de noviembre próximo.