Por Martín Davis
Pekín, 24/07/2014(El Pueblo en Línea)-La profundización de las cooperaciones entre los países del BRICS refleja la transferencia del poder económico global desde los países occidentales a los países de mercados emergentes, y la evolución del nuevo orden económico internacional después de la crisis financiera global.
Después de que comenzara la crisis financiera internacional en el año 2008, surgieron las cuestiones y críticas sobre la ideología de mercado liberal de la “Conciencia de Washington”, por lo menos en Sudáfrica. Durante un periodo existían numerosas discusiones, entre las cuales, si la “Conciencia de Pekín” recién llegada podría producir las fuerzas de tracción, y convertirse en los principios directivos para los países en vías de desarrollo, o sea, un nuevo modelo distinto al “camino occidental” tradicional.
La “Conciencia de Pekín” se refiere al “crecimiento al estilo chino”, un concepto que para África todavía es algo inalcanzable, porque es obvio que la mayoría de los países africanos se enfrentan a diferentes situaciones de desarrollo que China. Sin embargo, esta diferencia no constituye ningún obstáculo para los países africanos que intentan aprender las medidas beneficiosas de China. Bajo el liderazgo del presidente sudafricano Jacob Zuma, el gobierno dominado por el Congreso Nacional Africano siempre describe Sudáfrica como “un país de desarrollo”, es decir, Sudáfrica se está preparado para abrazar el nuevo modelo chino, con las expectativas de que el país y el gobierno desempeñen un mayor y mejor papel en la motivación del crecimiento económico.
La palabra BRICS al principio fue un concepto para referirse a los países de mercados emergentes y a las economías con mayor población, y luego evolucionó a un mecanismo de cooperación con mayor fuerza, que refleja la transferencia del poder económico global desde los países occidentales a los países de mercados emergentes, y la evolución del nuevo orden económico internacional después de la crisis financiera global.
Desde que Sudáfrica se convirtiera formalmente en un miembro de los BRICS en el año 2010, ha sido uno de los miembros más entusiastas. Los países del BRICS representan el primer escalón de los países en vías de desarrollo, y una fuerza importante del sistema de gobierno económico internacional después de la crisis financiera. La integración de Sudáfrica en el grupo BRICS fue considerada como el mayor éxito del gobierno de Zuma.
Uno de los principales proyectos del mecanismo de cooperación de los BRICS es establecer el Banco de Desarrollo BRICS, que después de su fundación, podrá ayudar a aumentar la construcción de infraestructura en África. Además, el gobierno sudafricano también está buscando integrar cooperaciones con los países del BRICS en su diseño diplomático.
Los países de BRICS no discutieron mucho sobre la liberación del comercio entre ellos, un efecto que ayudará a disminuir el proteccionismo en el comercio global. También prestan mucha atención a las cooperaciones con los países en vías de desarrollo, y proponen estrechar las cooperaciones entre los mismos países en vías de desarrollo y profundizar las cooperaciones entre los países del BRICS, que ambos favorecerán a la reforma del sistema de gobierno económico internacional.
Es muy preciosa la “Conciencia de BRICS” que se está formando: buscar ampliamente cooperaciones con todo el mundo, especialmente con los países en vías de desarrollo, y explorar un modelo particular conforme con el propio crecimiento económico en vez de buscar la orientación de desarrollo en Occidente.
(El autor es director ejecutivo de la Compañía de Asesoramiento Innovador de Sudáfrica)