DAMASCO, 11 jun (Xinhua) -- El presidente de Siria, Bashar al-Assad, dijo que el diálogo nacional caracterizará a su nuevo periodo en el cargo, en una entrevista reciente con el periódico libanés al-Akhbar publicada hoy.
El diálogo es el foco principal en esta etapa actual, dijo el presidente al periódico. "Nos hemos reconciliado con los hombres armados y declarado una amnistía para ellos, así que cómo no podemos dialogar entre nosotros", indicó.
El presidente ahora está más convencido de la capacidad de los sirios para superar la crisis de tres años.
La entrevista tuvo lugar después de que el presidente ganara un tercer periodo de siete años en el cargo en las controvertidas elecciones que fueron descalificadas por la oposición y sus simpatizantes de Occidente. Assad está tratando de mejorar su imagen ante el mundo al presentarse como un reformador político.
"Me he reunido con gente y delegaciones y he sentido desde entonces los primeros momentos de esta crisis... que los sirios confían en el Estado, en su presidente y en su ejército y es por eso que sigo apostando a la capacidad de la gente para atacar la raíz la conspiración", dijo Assad. El presidente hizo el comentario en referencia a la postura del Ministerio de Relaciones Exteriores sirio de que el levantamiento armado fue inspirado por el extranjero.
"Las elecciones presidenciales se dieron para enfatizar que la gente no ha cambiado a pesar de las campañas de los medios de comunicación, el terrorismo y la conspiración extranjera", agregó el presidente.
Las elecciones presidenciales de la semana pasada fueron los primeros comicios en los que contendieron varios candidatos en la historia moderna de Siria. Assad logró una amplia mayoría de votos, y derrotó a sus contendientes poco conocidos, el ex ministro Hassan Nouri y el legislador Maher Hajjar.
El lunes, Assad declaró una amnistía general que abarca los delitos cometidos antes del 9 de junio. Su perdón fue elogiado por los abogados sirios como "incluyente" pues sólo excluyó "muy pocos delitos".
Durante la entrevista, el presidente sirio también elogió a sus principales aliados, Rusia e Irán, y rechazó la idea de que el enojo popular tuvo un papel importante en el levantamiento.
"El presidente Vladimir Putin apoyó y sigue apoyando la postura siria por su convicción de que lo que Siria ha atravesado no fue resultado del resentimiento popular, sino del deseo de los países extranjeros de destruir el papel de Siria. Y mientras esos países violan las leyes internacionales y los derechos humanos, Rusia ha reiterado en repetidas ocasiones su apoyo", agregó al-Assad.
A pesar del hecho de que los lazos entre Irán y Occidente están volviéndose más cálidos en medio de las negociaciones nucleares, a Assad no le preocupa que estos acontecimientos cambien el apoyo de Irán hacia su administración.
"Irán no es el que cambiará con Siria. Sigue firme en su postura aun más de lo que nadie más puede saber, pero es Estados unidos y Occidente quienes han comenzado a enviar señales de un cambio (en sus posturas)", dijo el presidente, quien agregó que son sus países los que han comenzado a exportar el "terrorismo".
El presidente dijo que algunos funcionarios actuales y anteriores estadounidenses están dispuestos a acercarse al régimen sirio, aunque los grupos de presión tratan de evitar que lo hagan, una señal de que la superpotencia del mundo está en conflicto sobre la crisis siria.
A pesar de todo el énfasis en el diálogo, el presidente mostró poco interés en hablar con los opositores sirios exiliados y los calificó de extranjeros.
"¿En qué beneficiaría sostener el diálogo con la oposición en el exilio? En nada. Simplemente porque ellos no tienen nada. No están ligados con la gente ni con la tierra. Han estado vendiendo ilusiones mediante Occidente y los países árabes y también vendieron ilusiones a la gente, pero las elecciones actuales han logrado desnudarlos", aseveró el presidente.
"La gente ha expresado su opinión y debemos respetarla", agregó y dijo que las elecciones han cambiado a Siria.
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