BEIJING, 5 jun (Xinhua) -- Rechazar la interferencia de terceros, que se meten para buscar su propio beneficio, y poner fin a la tensión creada por la plataforma petrolera en el Mar Meridional de China, podrán aclarar la forma en la que China y Vietnam se perciben entre sí.
Como una relación interpersonal, cuanto más cercanos estén los dos países, más complicados serán sus vínculos.
China y Vietnam habían vivido una historia mezclada con la amistad y el conflicto. Ahora, sin embargo, la provocación repetida de Vietnam contra la operación normal de una petrolera china cerca de las islas Xisha ha creado la situación más tensa entre los dos países en los últimos años.
Lo que ha pasado no puede cambiarse, pero lo que las dos naciones hagan a partir de ahora afectará no sólo a sus lazos bilaterales, sino también a la estabilidad y seguridad regionales.
China ha dejado muy claro lo que hará.
Durante la IV Cumbre de la Conferencia sobre Interacción y Medidas de Construcción de Confianza en Asia (CICA, siglas en inglés) celebrada en mayo en Shanghai, el presidente chino, Xi Jinping, formuló un concepto de seguridad común, integral, cooperativo y sostenible para Asia.
Esta estrategia se reiteró en el Diálogo de Shangri-La celebrado en Singapur la semana pasada.
Desde la perspectiva de un juego de suma cero, Vietnam seguramente tiene que preocuparse por un vecino cada vez más grande y poderoso como China.
No obstante, este no es el juego que China va a jugar. El presidente Xi lo calificó como una mentalidad de Guerra Fría.
"Ningún país debe buscar la seguridad absoluta por sí mismo a costa de los demás... No podemos tener solamente la seguridad de uno o unos pocos países dejando al resto inseguro", afirmó Xi en la CICA.
En virtud de su concepción de la seguridad, China respalda la igualdad, integración y cooperación en Asia.
Como Xi sugirió, las cuestiones de seguridad en Asia deben ser resueltas por los asiáticos a través de la cooperación. Esta disputa en el Mar Meridional de China sólo puede solucionarse conjuntamente por China y Vietnam.
La pregunta es si Vietnam tiene la mente abierta y la visión de compartir este nuevo concepto de seguridad con China.
Los dos países son diferentes en cuestión de tamaño, población, fuerza económica y política y cuentan con diferentes opiniones sobre algunos asuntos. Pero también son similares en la tradición, cultura y política, y tienen intereses comunes. Vietnam tiene que decidir centrarse en la diferencia o en la similitud.
La confrontación no es buena para Vietnam. El enfrentamiento con China, su socio económico más estrecho, ha costado al país muchas pérdidas, generando inestabilidad, causando desempleo y perjudicando su reputación a los ojos de los inversores internacionales.
Para algunos países, la tensión en el Mar Meridional de China es una oportunidad de influir en una región remota. El caos persistente se ajusta a sus necesidades.
Para China y Vietnam, su vida cotidiana se está viendo afectada. Cuanto antes disminuya la tensión, antes podrán centrarse en cuestiones reales e importantes.