Una mujer oye la sangre fluir por sus venas |
Una mujer británica llamada Julie Redfern tiene un oído anormalmente agudo debido a un raro trastorno, conocido como SCDS, que le permite escuchar el fluir de su propia sangre, el latido del corazón e incluso el sonido que producen sus globos oculares al moverse.
Redfern, nacida en Padiham, Reino Unido, padece un síndrome de dehiscencia del canal superior que provoca que para ella cualquier sonido se oiga a un volumen tan fuerte que en ocasiones la sensación es inaguantable.
Según informa el periódico Daily Mail, para esta británica de 47 años el timbre del teléfono es una tortura insoportable al igual que el eco de su propia voz o el ruido que produce su mandíbula al comer alimentos sólidos que podrían dejarla sorda.
A Redfern le diagnosticaron por primera vez este raro síndrome en 2006, al cumplir los 40 años. Al principio los médicos creían que los alarmantes síntomas eran consecuencia de que estaba entrando en la menopausia, o incluso de un trastorno mental, ya que lo que ella oía era imperceptible para los demás.
El SCDS fue descubierto en 1998 como una sensación de ruido causada por un agujero en el hueso temporal que expone el oído a una cantidad de vibraciones anormalmente alta, cosa que no ocurre en las personas sanas que tienen el hueco completo y las protege del ruido.
Los médicos ya realizaron con éxito la operación en una de las orejas de la mujer y ahora la paciente está esperando la segunda intervención. Sin embargo, la mujer confiesa que podría llegar a extrañar algunos de esos sonidos raros a los que tiene acceso.