BEIJING, 12 may (Xinhua) -- Además de reforzar la capacidad nacional de la lucha contra el terrorismo, es vital para China cortar las conexiones internacionales de los terroristas para ganar la batalla, dijo hoy lunes un experto en antiterrorismo en un artículo publicado por el rotativo local Diario del Pueblo.
"El cambiante entorno internacional fue un importante factor que causó el empeoramiento de las amenazas terroristas de China en un plazo de tiempo muy corto", dijo Zhang Jiadong, de la Universidad Fudan, a través del períodico insignia del Partido Comunista de China (PCCh), refiriéndose a la última serie de ataques terroristas en el país.
El 30 de abril se produjo una explosión en la estación ferroviaria de Urumqi, capital regional de la región autónoma uygur de Xinjiang, en el noroeste de China, tras los ataques terroristas perpetrados en otra estación de trenes de la ciudad suroccidental de Kunming en marzo y en la simbólica plaza china de Tian'anmen en Beijing el pasado octubre.
Zhang dijo que la corriente del terrorismo internacional se ha extendido por China.
Citando un informe gubernamental de EEUU, Zhang dijo que cinco de los seis países más frecuentemente afectados por ataques terroristas el año pasado son vecinos de China, con más de 4.600 ataques terroristas ocurridos dentro de sus fronteras en 2013.
"Pese a una situación de seguridad relativamente buena, es difícil para China mantenerse distante", señaló.
Después del cambio estratégico estadounidense de pasar del antiterrorismo a la seguridad convencional, los terroristas empiezan gradualmente a ampliar sus objetivos a países fuera de EEUU, indicó Zhang.
Los conflictos entre el auge de China y las fuerzas antichinas también juegan su papel en el aumento de las amenazas terroristas, según el experto.
El problema de las fuerzas separatistas "Turkestán Oriental" es de hecho una conspiración de organizaciones políticas que operan bajo el pretexto de "democracia y derechos humanos" y grupos terroristas que dan abrigo al extremismo religioso, de acuerdo con Zhang.
"El terrorismo es un problema internacional", dijo él. "Sin apoyo político, económico, técnico y de la opinión pública en el extranjero, los grupos terroristas generalmente no pueden sobrevivir, ni mucho menos desarrollarse".
Zhang pidió esfuerzos para establecer y consolidar mecanismos antiterroristas, tales como la estructura antiterrorista regional de la Organización de Cooeración de Shanghai, y propuso el establecimiento de un marco contra el terror de Asia que consolide los intercambios y la coordinación en el terreno.
El experto sugerió que China cree una serie de contramedidas para dar las alarmas necesarias o incluso respuestas punitivas a las organizaciones extranjeras que respalden sin escrúpulos a las fuerzas terroristas en China, dijo.
China debe también tomar la iniciativa a la hora de participar en la cooperación internacional contra el terrorismo, ya que muchas fuerzas terroristas antichinas fundan sus órganos de dirección y bases de entrenamiento en el extranjero, agregó Zhang.
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