ZHENGZHOU, 14 nov (Xinhua) -- La policía en la provincia central china de Henan ha abolido un sistema que clasificaba a las unidades respecto a los casos resueltos con el objetivo de evitar que debido a la presión se incurriera en métodos impropios como los interrogatorios con torturas, informó hoy jueves un oficial de la policía local.
No habrá clasificaciones entre los departamentos de seguridad pública respecto al número de casos resueltos o los de sospechosos arrestados o procesados, de acuerdo con un documento de diez puntos publicado por el Departamento de Seguridad Pública de Henan con el objetivo de mejorar la aplicación de la ley criminal.
La reacción pública sobre el nuevo sistema de evaluación impulsará a la policía a trabajar con más esfuerzo para resolver los casos, dijo Hua Liebing, alto oficial del departamento.
Durante los interrogatorios de todos los casos criminales se harán grabaciones audiovisuales simultáneas, agregó el documento adoptado a finales de octubre.
Estas medidas ayudarán a garantizar que la policía no interrogue a los sospechosos con la ayuda de la tortura o trate los casos de manera injusta o errónea debido a la presión procedente de los objetivos previamente establecidos del número de casos resueltos ni los periodos de tiempo de resolución de los casos, añadió Hua.
En 2004, Henan comenzó a incluir la tasa de casos resueltos como uno de los factores para examinar el desempeño policial, ya que la provincia enfatizó el principio de acabar con los casos con muertos.
Tras la introducción de las clasificaciones, la tasa de casos mortales resueltos subió del 60 por ciento antes de 2004 al 96 por ciento en 2007. Sin embargo, la medida también condujo a algunos arrestos y penas de cárcel equivocados.
En uno de los errores más conocidos del país, Zhao Zuohui, un campesino en Henan, fue puesto en libertad en 2010 después de permanecer once años en cárcel al ser hallado culpable de homicidio mientras que la presunta víctima apareció viva.
Zhao dijo que la policía lo torturaba para que confesara el crimen que no había sucedido.