DAMASCO, 26 Feb (Xinhua) -- Luego que las conversaciones previas de Ginebra no arrojaron resultados tangibles, la oposición siria y sus seguidores están explotando temas militares y humanitarios para presionar concesiones del gobierno en la próxima ronda de negociaciones de paz, según analistas.
En el diálogo a mediados de febrero, la oposición demandó la formación de un cuerpo gubernamental de transición sin ningún papel para el presidente Bashar Al-Assad, mientras que el gobierno, con una ventaja en el campo de batalla, insistió en privilegiar las discusiones contra el terrorismo, al señalar que los grupos vinculados a al-Qaida estaban floreciendo en toda Siria.
Analistas dicen que la oposición, cuya dirigencia se encuentra en Estambul, Turquía, y sus simpatizantes están ahora ejerciendo presión sobre el gobierno de Assad en vista de la próxima ronda de conversaciones que iniciará en unas pocas semanas.
Luego de las conversaciones a mitad de este mes, algunos líderes de potencias del mundo refirieron el deterioro de la situación humanitaria en Siria, presionando para la adopción de una resolución de las Naciones Unidas que reclama el acceso humanitario a todas las ciudades.
Además de los civiles, los rebeldes con recursos limitados en las ciudades sitiadas también se benefician de la resolución.
Esam Khalil, un legislador sirio, dijo a Xinhua: "la situación humanitaria en Siria se ha convertido en un activo político para Occidente", el cual apoya la oposición. También destacó que mientras el gobierno está comprometido con la entrega de ayuda, algunos "terroristas" estaban entorpeciendo el proceso.
El legislador cree que un consenso ruso-estadunidense sobre una solución política y la seriedad de Estados Unidos en ese aspecto contribuirían mucho para el término de la crisis siria de tres años.
Además de explotar la situación humanitaria, los combatientes de oposición están planeando según diversos informes una escalada ofensiva en los alrededores de Damasco en un intento por romper el sitio del gobierno y detener sus avances en el centro del país. (Continúa)
La libanesa al-Manar TV, junto con los canales de TV siria afines al gobierno, dijeron que algunos países de Occidente y árabes estaban concitando un mayor apoyo para los rebeldes, en particular en la suroriental provincia de Daraa, fronteriza con Jordania.
Algunos informes dijeron que miles de rebeldes estaban recibiendo entrenamiento especial en campos de la frontera siria-jordana con el propósito de lanzar ataques a la capital siria, a unos 98 kilómetros de Daraa.
En noviembre pasado, fuerzas gubernamentales abortaron una ofensiva rebelde y dieron muerte a cientos de militantes cuando avanzaban hacia Daraa desde Jordania. Ese episodio ha fortalecido la noción de que había un esquema diseñado en la región sureña.
"No hay país en el mundo que pueda garantizar una cobertura legítima para el terrorismo en Siria. El ejército sirio ha adoptado todas las medidas necesarias y los planes de emergencia para encarar cualquier tipo de evento en ese ámbito", dijo Khalil a Xinhua.
En tanto, Maher Murhej, jefe del opositor Partido de la Juventud, desestimó las amenazas de una operación militar en el sur. "Esta batalla no sobrevendrá porque si realmente fue planeada..., no hablarían de ella. Es un intento para liberar cierta presión sobre los rebeldes en Yabrud", una ciudad en el centro de Siria. Murhej predijo que las próximas conversaciones de paz se realizarán en dos semanas, lo que alienta una expectativa sobre una decisión internacional contra el terrorismo y la definición de un órgano gubernamental de transición.
Destacó que los recientes acontecimientos fueron una reminiscencia de tensiones fortalecidas al término de una amenaza de Estados Unidos para incursionar en Siria por un presunto ataque químico fuera de Damasco en 2013. La amenaza fue cancelada luego de que Siria aceptó la destrucción de su arsenal químico con base en una supervisión internacional.
" La escalada reciente busca concesiones de la dirigencia siria ante su postura intransigente respecto a la formación de un gobierno interino. Así que es frecuente que cuando escuchamos tambores de guerra, no habrá guerra", aseveró.
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