(SPANISH.CHINA.ORG.CN)- El parlamento ucraniano, la Rada rechazó ayer votar una moción de censura contra el gobierno que dirige Mikola Azárov.
La propuesta que habían presentado los grupos parlamentarios de oposición fue votada por 186 diputados, sin embargo se necesitaba un mínimo de 226 para que saliera adelante.
Según los argumentos de la oposición, es necesario tumbar al Gobierno, ya que éste se negó a firmar un acuerdo de asociación con la Unión Europea, lo cual provocó además intensas manifestaciones en el centro de Kíev, la capital ucraniana y las más numerosas desde la llamada revolución naranja de 2004. Para echar fuego a la hoguera, las fuerzas antidisturbios desalojaron a palos la noche del sábado a unos mil manifestantes que permanecían en las plazas centrales de la capital.
Por exigencias de la Cámara, todos los ministros se presentaron ante los diputados, que les recibieron al grito de “¡Ganba!”, “vergüenza” en ucraniano.
Antes del comienzo de las votaciones, Azárov asumió la responsabilidad por el uso de la fuerza contra los manifestantes en la plaza central (Maidán). Agregó además, que en los disturbios que han rodeado las manifestaciones de estos días han resultado heridos 162 agentes de policía. La mayor manifestación se produjo el domingo, cuando la oposición logró reunir a más de 100.000 personas. Aunque algunas fuentes aseguraron que al centro de Kíev se congregaron hasta 350.000 protestantes.
Por la expulsión del Gobierno votaron 90 diputados de Batkivshina (Patria), el partido de la encarcelada ex primera ministra Yulia Timoshenko; 42 de UDAR, el partido que dirige el campeón del mundo de boxeo Vitali Klichkó; 36 del nacionalsita Svoboda (Libertad), 17 independientes y uno del gubernamental Partido de las Regiones.
Antes de la votación, Arseni Yatseniuk, que dirige Patria en ausencia de Timoshenko, dijo que en caso de fracasar la oposición exigirá de todas maneras al presidente, Víktor Yanukóvich, la reprobación del Ejecutivo.
Los comunistas se negaron a votar. Y el Partido de las Regiones pidió estabilidad. “No vamos a votar la expulsión del Gobierno. Ucrania necesita tranquilidad, estabilidad y orden legal. Y ustedes esto no lo pueden garantizar”, espetó a los partidarios del impeachment el diputado Vladímir Oleinik.
Mikola Azárov aprovechó la sesión en la Rada para recordar que la víspera, la Unión Europea se mostró de acuerdo en revisar la cuestión de la compensación financiera a Ucrania por las pérdidas que le ocasione el acuerdo con la Unión. Dichas pérdidas serían consecuencia, por un lado, de los ajustes a los que el país se tendrá que someter; pero, por el otro lado, de la posición de Rusia, que podría endurecer las condiciones a las exportaciones ucranianas, a su industria y a la compra de gas natural. La Unión Europea acusa a Rusia de presionar políticamente a Ucrania para llevarla al rechazo del acuerdo.
“Ayer en mi presencia el presidente de Ucrania tuvo una larga convesación telefónica con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso. Nos pusimos de acuerdo en que continuaremos las conversaciones sobre las condiciones de la firma y sobre la zona de liber comercio”, explicó el primer ministro. Anunció que la próxima semana viajará una delegación ucraniana a Bruselas.
Con este argumento, exigió “parar inmediatamente” el bloqueo del edificio del Gobierno, rodeado por partidarios de la oposición. “Ustedes van a asumir la responsabilidad”, dijo a quienes le gritaban “¡Dimisión! ¡Dimisión!”.
Mientras se votaba, cientos de partidarios de la oposición rodearon la Rada en espera de noticias. La situación en el centro de Kiev se mantiene tranquila, aunque por la tarde se han convocado nuevos mítines en la Maidán.
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