LISBOA, 29 sep (Xinhua) -- El Partido Socialdemócrata (PSD) del primer ministro portugués Pedro Passos Coelho, fue el principal derrotado en las elecciones municipales de este domingo en Portugal, al perder las principales alcaldías del país.
Con el 80 por ciento de los votos escrutados, el PS se perfila como vencedor de los comicios, con el 37,23 por ciento de los votos a su favor, por delante del PSD que apenas obtuvo el 20,32 por ciento.
La tercera fuerza política más votada en los municipios fue la izquierdista Coalición Democrática Unitaria (CDU), formada por el Partido Comunista Portugués (PCP) y Los Verdes, (9,44 por ciento), que le ha permitido recuperar las alcaldías de Evora, Beja y Grándola, tres de las ciudades comunistas más representativas.
Los comunistas portugueses se alegraron con este resultado electoral, que para ellos es toda una victoria.
Jerónimo de Sousa, secretario general comunista, expresó que la recuperación de Evora y Beja, que se suman a otros municipios como Alcácer do Sal, Alandroal, Cuba, Vila Viosa, Monforte y Silves, es una señal de "esperanza y confianza de que es posible otro camino y otro rumbo" para el país.
Los comunistas también interpretan esta victoria como "un nuevo estímulo para continuar la lucha", contra las políticas de austeridad implementadas por el ejecutivo de derecha durante los dos últimos años.
De hecho, esta austeridad, que se ha traducido en cortes salariales para la función pública y subida de impuestos o reducción de beneficios fiscales para el resto de los trabajadores del sector privado, podría ser la principal razón para la derrota electoral del partido de Coelho, que se ha quedado sin los principales municipios del país.
Concretamente, en Lisboa, el candidato socialista y actual alcalde Antonio Costa, obtuvo su tercera victoria consecutiva, reforzando su mayoría absoluta.
Por otro lado, en Oporto los socialdemócratas perdieron la alcaldía, que llevaba desde 2001 en manos de Rui Rio, que no participó en estos comicios.
En la segunda ciudad del país, la sorpresa la dio el independiente Rui Moreira, que consiguió más votos que los candidatos de los principales partidos.
El candidato del PSD, Luis Filipe Menezes, que era alcalde del vecino municipio de Vila Nova de Gaia, quedó en tercera posición, por detrás de los socialistas.
Su salida de Gaia también supuso una derrota para el PSD, a favor del Partido Socialista, que recupera esta alcaldía 16 años después.
Para Moreira, la victoria de un independiente en Oporto significa que "ninguno de los dos partidos ha hecho bien las cosas", de ahí que los habitantes de Oporto hayan optado por un candidato sin pasado político.
Pero a pesar de que los portugueses parecen haber penalizado la política de austeridad del gobierno, el Partido Socialista, principal partido de la oposición, también ha perdido algunos ayuntamientos importantes, como Evora, Beja, Braga, Guarda y Matosinhos.
"Ningún partido puede ganar en todos los municipios porque además el poder no es eterno", afirmó el secretario general António José Seguro, durante la noche electoral. Aún así, el líder socialista habló de "victoria" para su partido.
"El primer ministro debería entender que ha habido una penalización a sus políticas", dijo Seguro, insistiendo en que hay dos caminos muy diferentes, "el del gobierno y la troika y el camino del PS".
Para él, salir de la crisis exige "rigor y disciplina presupuestaria, pero también dar prioridad a la creación de empleo y al crecimiento de la economía".
Estas eran las primeras elecciones que se celebraban desde que Portugal tuvo que solicitar la ayuda externa, en mayo de 2011 y se han realizado mientras transcurren en Lisboa la octava y novena evaluación del programa de ayuda externa.
Según una encuesta divulgada este domingo por el diario luso Correio da Manha, si se realizaran hoy elecciones generales, para las que faltan dos años, el PS vencería con el 34,5 por ciento de los votos, por delante del PSD del primer ministro, que obtendría el 30 por ciento.
En tercera posición estaría la CDU formada por el Partido Comunista y Los Verdes, con el 10,5 por ciento.
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