El primer ministro interino de Egipto, Hazem al-Beblawi, reiteró hoy el exhorto a los simpatizantes del depuesto presidente Mohamed Morsi de que cesen sus protestas en la plaza Rabaa Al Adawiya y en la plaza Al Nahda, informó la televisión estatal.
El gobierno no ha cambiado su decisión de poner fin a las manifestaciones en las dos plazas, una en El Cairo y otra en Giza, donde los seguidores del destituido líder islámico han estado protestando durante 40 días, dijo Beblawi en un comunicado de prensa transmitido por la televisión.
"Los manifestantes excedieron todos los límites de tranquilidad al incitar a la violencia, utilizando armas, bloqueando carreteras y deteniendo ciudadanos", dijo el primer ministro interino.
"La paciencia del gobierno está a punto de acabarse", dijo. El gobierno no utiliza la fuerza considerando la solemnidad del mes sagrado del Ramadán.
"Cualquier uso de armas en contra de las fuerzas de seguridad o de ciudadanos comunes será confrontado con severidad", añadió.
La semana pasada, el Ministerio del Interior pidió a los manifestantes leales a Morsi que sean razonables y cesen sus protestas. El ministerio reiteró su interés por la seguridad de los manifestantes, su promesa de defender sus derechos y de garantizar su "salida segura".
Esta mañana, la presidencia de Egipto dijo que han sido en vano los esfuerzos diplomáticos para exhortar a la Hermandad Musulmana y a sus seguidores a que cesen el derramamiento de sangre, a pesar del apoyo total del gobierno interino, reportó la agencia estatal de noticias MENA.