KUALA LUMPUR, 6 may (Xinhua) -- Najib Razak comenzó este lunes su segundo mandato como primer ministro de Malasia, con la desalentadora tarea de la reconciliación nacional, tras unas elecciones muy reñidas.
El partido gobernante de Najib, Barisan Nasional, logró mantener el poder en las elecciones generales del domingo con una mayoría simple de 133 de los 222 escaños de la cámara baja del Parlamento.
Durante una rueda de prensa después de declarar su victoria la madrugada del lunes, Najib advirtió contra una "preocupante" polarización de la votación. Indicó también que su Gobierno emprenderá una reconciliación nacional para evitar el "extremismo y el racismo".
"Continuaremos con la promoción de la moderación entre los malayos multiraciales, ya que el Gobierno de Barisan presta gran importancia en la armonía racial y a la unidad nacional", indicó.
Barisan atribuye su victoria al potente apoyo en las zonas rurales dominadas por los malayos, así como al éxito moderado de los estados de Sabah y Sarawak, dos baluartes tradicionales de Barisan en el este de Malasia.
La oposición, dirigida por el ex viceprimer ministro Anwar Ibrahim, rechazó los resultados electorales, citando alegaciones del fraude generalizado.
Najib ha negado la acusación de la oposición de que el Barisan había introducido "votos fantasma" en los comicios.
Al mismo tiempo, Najib tendrá que trabajar con esfuerzo para consolidar su posición en la Organización Nacional de Malayos Unidos (UMNO, siglas en inglés) que domina la coalición gobernante.