El Departamento de Estado norteamericano confirmó este viernes la muerte de un rehén estadounidense entre los más de 130 trabajadores extranjeros secuestrados el pasado miércoles en un complejo de gas natural por milicianos afiliados a Al-Qaeda en Argelia.
"Transmitimos nuestras más sinceras condolencias a sus familiares y amigos", destacó en un comunicado la portavoz del Departamento de Estado Victoria Nuland, quien identificó a la víctima como Frederick Buttaccio, del estado de Texas.
Aunque Nuland no ofreció más detalles, la prensa norteamericana aseguró que los restos mortales de Buttaccio habían sido recuperados del complejo de gas natural cerca de Amenas, en la sureña provincia argelina de Illizi.
Aún se desconoce si Buttaccio fue el único trabajador estadounidense fallecido en la actual crisis de los rehenes, que supuestamente constituye una especie de venganza por el apoyo de Argelia a la intervención de Francia en el conflicto del vecino Malí. Tampoco se tienen noticias hasta el momento de al menos 30 trabajadores extranjeros.
Las tropas argelinas protagonizaron el jueves una operación por aire y tierra para rescatar a los rehenes.
Más de 670 de los secuestrados, incluidos 573 argelinos y unos 100 extranjeros, fueron rescatados en la operación, en la que además murieron 12 rehenes locales y foráneos y 18 milicianos, manifestó la agencia de noticias oficial argelina APS.
Sin embargo, varios países, incluidos Japón y Reino Unido, se quejaron de no haber sido informados sobre la operación.