LA PAZ, 6 sep (Xinhua) -- El gobierno de Bolivia anunció hoy que estudia medidas orientadas a desacelerar la inflación en Bolivia, con el objetivo de no superar el 4,8 por ciento de alza en el Indice de Precios al Consumidor(IPC), proyectada para 2013.
El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Luis Arce, detalló que serán al menos dos medidas para controlar la inflación, que en agosto llegó a 4,23 por ciento en el año.
"Estamos trabajando un par de medidas, que cuando las tengamos listas las haremos conocer a la población", anticipó a los medios de prensa.
Dijo que desde su despacho están haciendo todos los esfuerzos para generar medidas "imaginativas" destinadas a controlar la inflación.
"La población tiene que estar segura de que vamos a hacer todos los esfuerzos para controlar que no sobrepasemos el 4,8 por ciento, proyectado para este año", dijo.
Añadió que, en coordinación con el Banco Central de Bolivia, inició la evaluación de los últimos datos inflacionarios arrojados por el estatal Instituto Nacional de Estadística (INE), en especial de agosto, cuando el IPC acumulado se aceleró a 4,23 por ciento.
No obstante, adelantó que el precio del pollo se estabilizará en las próximas semanas y también algunos productos agrícolas, debido a "que se viene la época de cosecha".
Según datos oficiales del INE, la inflación de agostó es la mayor de los ocho meses del año, con un incremento de 1,34 por ciento en relación con julio.
En ocho meses la inflación está en 4,23 por ciento, muy cerca del porcentaje calculado para el año, 4,8 por ciento, tomando en cuenta los números del INE y de la proyección 2013 realizada por el gobierno.
La elevación del costo de la canasta familiar se acerca al índice de precios finales del 2010, puesto que en diciembre de ese año se alcanzó 1,76 por ciento.
Los alimentos subieron de costo por encima del Indice de Precios al Consumo, pues el aumento llegó a 4 por ciento, además de que en restaurantes y hoteles se encareció en 1 por ciento, de acuerdo con el informe oficial.
Los culpables de este incremento tan elevado, como no ocurre desde hace más de dos años, son el tomate, que subió en 52 por ciento; la carne de pollo, 13 por ciento; la papa, 12 por ciento, y las presas de pollo, 12 por ciento.