El vicepresidente de Bolivia, Alvaro García Linera, reivindicó hoy la aplicación de un nuevo modelo de desarrollo que brinde bienestar a los pueblos latinoamericanos ante lo que denominó el fracaso del sistema neoliberal en los países del primer mundo.
García Linera arribó a El Salvador para participar en un evento organizado por el partido gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) en la sede de la estatal Universidad de El Salvador (UES), antes cientos de estudiantes.
El vicegobernante boliviano defendió la política del "buen vivir" como un nuevo paradigma político en la región latinoamericana, tal como lo esgrime el vicepresidente de El Salvador y candidato presidencial por el FMLN, Salvador Sánchez Cerén.
Sánchez Cerén defendió que los cambios en la política de desarrollo y la triplicación de la inversión en el gasto social en los últimos cuatro años son ejemplo de la apuesta de la izquierda salvadoreña.
García participó junto a Sánchez Cerén en la clausura de unas jornadas de reflexión organizadas por el FMLN y que fueron denominadas "Diálogos culturales de invierno".
Para el dirigente político de Bolivia, el paradigma "es un ideario de potenciamiento del bien común, transformador de sociedades caracterizadas por el individualismo, el consumismo y la depredación de la naturaleza porque si estamos juntos, seguiremos adelante, pero si nos encerramos, nos destrozan".
García destacó que esa visión consolidó el gobierno del presidente Evo Morales a partir del cambio en el orden político mediante la firma de una nueva Constitución de la república y la nacionalización de los recursos naturales.
Por su parte, el candidato Sánchez Cerén argumentó que "el ideario del buen vivir surge como una esperanza de una vida mejor para los pueblos, frente a los cimientos de un modelo neoliberal agotado, que se tambalea víctima de sus propias contradicciones".
Sánchez Cerén prometió que los proyectos iniciados por el mandato de Mauricio Funes continuarán profundizándose en servicios sociales como educación y salud si gana las elecciones presidenciales en febrero de 2014.
Ambos políticos compartieron mesa con el escritor brasileño Celio Turino quien también fue invitado a las jornadas de reflexión.
El Salvador es gobernado por la izquierda desde 2009 luego que el experiodista Mauricio Funes ganó las elecciones presidenciales ante un exjefe de la policía, que representó al partido de derechas Alianza Republicana Nacionalista (Arena).
De cara a los próximos comicios, los candidatos de ambos partidos, el exalcalde capitalino, Norman Quijano, y el vicepresidente Sánchez Cerén puntean los sondeos de opinión por delante del exgobernante Antonio Saca, que puja como tercera fuerza.
Pese a los vaticinios preelectorales, los dos principales partidos del país adelantan que las elecciones serán complejas y ajustadas porque ninguna encuesta arroja una ventaja por encima del 50 por ciento de los votos, de modo que no descartan una segunda ronda electoral.
Para la derecha es la oportunidad de recuperar el poder que mantuvo durante 20 años, en tanto que el Frente esgrime una nueva victoria para llevar a cabo un plan de gobierno de mediano plazo.