El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, llamó el martes a Pyongyang y Seúl a mantener "la cordura y a que prevalezca la paz" en el conflicto suscitado en la península coreana, con el fin de bajar las tensiones y evitar una probable guerra nuclear.
"Corea del Norte (República Popular Democrática de Corea) ha declarado estado de guerra (contra Corea del Sur) y es algo que nos tiene que preocupar a todos", dijo el mandatario a la prensa local en la ciudad costera de Guayaquil (suroeste).
El gobernante sostuvo que la situación entre ambas Coreas "es algo gravísimo", que incluso "puede desatar una guerra nuclear".
Sin embargo, consideró que "no creo que las cosas lleguen a más" y destacó que "Ecuador siempre va a buscar que los conflictos se resuelvan por el diálogo, por métodos pacíficos y va a rechazar cualquier llamado a la violencia, cualquier estado de guerra".
Además, recalcó que su país ha apoyado la tesis de la "desnuclearización de la península coreana y del mundo entero".
"Debemos liberar al mundo de armas nucleares porque en esto también hay bastante doble estándar, bastante inconsistencia: que tú si puedes tener porque eres mi 'pana' (amigo); tú no, tú eres un demonio, tú eres el mal", apuntó.
En este sentido, opinó que la comunidad internacional debería tener "un sólo estándar" y dijo que "la Organización de las Naciones Unidas (ONU) debe liderar acciones hacia el diálogo y distensión".