El gobierno argentino informó que -para evitar un eventual embargo del avión presidencial Tango 01- resolvió arrendar una aeronave inglesa para que la presidenta Cristina Fernández desarrolle desde el próximo jueves una gira oficial que la llevará a Cuba, Emiratos Arabes Unidos, Indonesia y Vietnam.
En un comunicado, precisa que el "26 de diciembre de 2012 la Dirección General de Consejería Legal del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto aconsejó a la Secretaría General (de la Presidencia) la no utilización del avión presidencial Tango-01 para dicho viaje, en razón de la postura agresiva de los 'fondos buitre' con la nación Argentina".
La recomendación fue formulada "ya que era altamente probable el intento de reclamos, medidas precautorias o de ejecución sobre dicha aeronave" por parte de esos fondos que reclaman el pago de deuda soberana no pagada de Argentina.
Según dicho texto gubernamental, la sugerencia de la cancillería local "fue compartida por la procuradora general de la nación, Angelina Abbona".
Por ello, "el Jefe de la Casa Militar, teniente coronel Agustín Rodríguez, el 28 de diciembre último, a fin de evitar circunstancias perjudiciales para el Estado argentino, aconsejó no emplear el T-01 para dicho viaje y contratar un avión particular".
Se precisa además que, por "el escaso tiempo disponible" para realizar dicha contratación "se resolvió realizar una compulsa de precios con empresas prestadoras de dicho servicio" y para ello "se invitó a 7 empresas, algunas de las cuales en anteriores ocasiones habían tenido relación con el Estado argentino" para solicitarles que cotizaran el valor del servicio requerido.
Se detalló más adelante que "se presentaron seis ofertas, con precios y características muy similares, resolviéndose contratar a la empresa inglesa Chapman Freeborn, con sede en el aeropuerto de Gatwick, Inglaterra, por resultar la más conveniente desde el punto de vista operativo, económico y financiero".
Además, se le contrató porque esa firma "ya había sido contratada por la Secretaría General de la Presidencia en los años 2010 y 2011 con motivo de los viajes presidenciales a Guyana, Madrid y París, y Barcelona y Cannes."
La Presidencia argentina informó después que "el costo total del alquiler a abonar a la empresa privada asciende a la suma de 880.000 dólares estadounidenses, que incluye todos los costos y gastos del viaje por 4 países".
La cifra representa un valor de "alrededor de un 20 por ciento superior a la operación (si se hubiera realizado con la aeronave oficial argentina) en el T-01."
En ese contexto, se informó también que "el presupuesto (...) para el caso de realizarse el viaje con el Avión Presidencial Boeing 757 T-01, asciende a la suma de 730.000 dólares estadounidenses".
Ese costo "incluye los gastos de combustible, tasas aeroportuarias, derechos de rampas, servicios de manejo de equipajes, alimentación a bordo y viáticos y gastos de toda la tripulación".