Al menos 11 personas murieron y otras 12 resultaron heridas de bala la última madrugada en Sao Paulo, horas después de que el gobierno regional anunciara que los homicidios aumentaron 48 por ciento en octubre en el estado más poblado de Brasil.
Los asesinatos se registraron en las zonas centro, sur y este de la ciudad de Sao Paulo, además de Franco da Rocha, Diadema y Mauá, ciudades situadas en el cinturón metropolitano de la mayor ciudad de Brasil y de América Latina.
Las 11 muertes y los 12 lesionados por arma de fuego, cifras confirmadas por la policía, ocurrieron poco después de que las autoridades paulistas divulgaran que en octubre murieron 571 personas por homicidio en el estado, 48 por ciento más que las 385 muertes registradas en igual mes de 2011.
El número de denuncias por homicidio doloso se situó en 505 casos en octubre, lo que supone un aumento del 37,9 por ciento respecto a igual mes de 2011, según los datos divulgados por la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Sao Paulo.
La dependencia policial situó la tasa de homicidios por cada 100.000 habitantes en octubre en 10,89 personas.
Entre enero y octubre de este año 4.107 personas fueron víctimas de homicidios en el estado de Sao Paulo y la cifra de denuncias por ese delito alcanzó las 3.834, 11,62 por ciento más que en los mismos meses de 2011.
La cifra de homicidios sólo en la ciudad de Sao Paulo, donde desde octubre se registra una ola de violencia, fue de 176 personas, 114,6 por ciento más que las 82 en igual mes de 2011.
El registro de este delito aumentó 92 por ciento en octubre en la ciudad de Sao Paulo al alcanzar 150 casos, frente a los 78 de 2011.
Este año, más de 90 policías han muerto asesinados en el estado de Sao Paulo, la mayoría mientras estaba fuera de servicio.
Fuentes policiales sostienen que se trata de crímenes asociados a una guerra encubierta entre los agentes y los miembros de la banda criminal Primer Comando de la Capital (PCC), un grupo criminal ligado al tráfico de drogas y armas, nacida en 1997 en las cárceles del estado de Sao Paulo y con tentáculos en todo el país.
El aumento de la violencia en Sao Paulo hizo que el secretario de Seguridad Pública, Antonio Ferreira Pinto, renunciara la víspera al cargo debido a las críticas recibidas por el aumento de la criminalidad. Su puesto lo ocupará el ex procurador general de Sao Paulo, Fernando Grella Vieira.
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