RIO DE JANEIRO, 21 ene (Xinhua) -- Al menos siete personas murieron y más de 2.200 tuvieron que ser desalojadas de sus casas como consecuencia de las fuertes lluvias en el estado brasileño de Espirito Santo (sureste del país), informó hoy la Defensa Civil.
Este martes, un cuerpo apareció ahogado en el municipio de Iconha, en la región sur de Espirito Santo, donde anteriormente ya habían muerto otras tres personas por las fuertes lluvias. Las otras tres víctimas fallecieron en el municipio de Alfredo Chaves por un deslizamiento de tierras.
En total, 2.204 personas fueron desalojadas de sus casas y 78 perdieron su vivienda en las ciudades más afectadas por las inundaciones. Según la Defensa Civil, muchas familias perdieron todo lo que tenían porque el agua llegó incluso en el segundo piso de varios edificios.
El gobernador de Espirito Santo, Renato Casagrande, decretó este lunes el estado de calamidad pública para los cuatro municipios más afectados de la región por las lluvias.
El gobernador también explicó nuevas medidas para auxiliar en la limpieza y la reconstrucción de las ciudades, que quedaron parcialmente arrasadas por el aumento del nivel del agua.