BEIJING, 5 dic (Xinhua) -- Las casas de expósitos, aquellos lugares donde se recoge a los niños abandonados, ayudarán a la protección de dichos infantes en China y se ajustan a la legalidad.
Dou Yupei, viceministro de Asuntos Civiles de China, hizo estas declaraciones en una conferencia de prensa hoy jueves en respuesta a una pregunta sobre un plan según el cual se permitiría a los padres abandonar a los niños no deseados en un "refugio para bebés" en la ciudad meridional china de Shenzhen.
El abandono de niños constituye un crimen en China, de manera que la decisión ha provocado sorpresa. Muchos creen que el "refugio para bebés" podría reducir el sentido de culpa parental y animar los actos de ese tipo. Sin lugares de protección semejantes, los padres esconden a los recién nacidos, lo que causa la muerte de muchos de ellos.
Las inclusas se ajustan al principio de protección de la vida y aseguran los derechos de los menores sin entrar en conflicto con la ley, dijo Dou, añadiendo que este tipo de instalaciones se utilizan en un gran número de países extranjeros.
El viceministro prometió una mejor protección y bienestar social para los huérfanos, los niños de la calle y aquellos infectados con el VIH. El gobierno mejorará la asistencia social para la gente desfavorecida que sufra enfermedades graves.
Los servicios sanitarios siguen siendo un punto débil dentro de la red de asistencia social y es perentorio cubrir a más personas necesitadas e incrementar los pagos para pacientes.
Dou hizo un llamamiento a las organizaciones benéficas y los voluntarios para que ayuden a los grupos sociales con menos recursos.