BEIJING, 25 nov (Xinhua) -- Las relaciones entre China y los países europeos se están volviendo más cercanas en el contexto de la globalización económica, con las visitas de alto nivel en aumento, la ampliación de la cooperación económica y comercial y el avance continuo de los intercambios interpersonales.
El jueves pasado, el primer ministro de China, Li Keqiang, y los líderes de la Unión Europea (UE) dieron inicio en Beijing a la XVI cumbre China-UE con el fin de elaborar un proyecto en relación a los lazos bilaterales de los próximos años.
Cinco días después, Li asistirá a la reunión de líderes China-Europa Central y Oriental (ECO) que se celebrará en Bucarest, capital de Rumania, con el propósito de aumentar el entendimiento mutuo y la cooperación.
Las dos cumbres, realizadas en el lapso de una semana, muestran que China y los países europeos siguen ampliando y profundizando sus relaciones.
Durante una reunión con el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, sostenida antes de la cumbre de Beijing, el presidente Xi Jinping dijo que China y la UE son dos importantes fuerzas en el mantenimiento de la paz mundial, dos importantes mercados para la promoción del desarrollo común y dos civilizaciones para el avance de la causa del progreso humano.
China y la UE tienen que tener en mente la tendencia de los cambios en la situación mundial, aprovechar las oportunidades, posicionar con exactitud la asociación estratégica integral en medio de un mundo multipolar y de la globalización económica y abrir nuevos caminos para el desarrollo de la cooperación entre China y la UE en medio de los cambios mundiales en la industria, de modo que beneficie a los pueblos de ambas partes y al mundo, dijo el presidente chino.
Europa, en especial las naciones desarrolladas del oeste del continente, es un importante socio de cooperación económica para China debido a la alta complementariedad entre Europa y China. Además, China también podría aprender de las experiencias de Europa durante el curso de sus reformas profundas e integrales.
Las estadísticas muestran que el comercio en bilateral entre China y la UE superó los 546.000 millones de dólares en 2012 y la UE se convirtió en el principal socio comercial de China y China en el segundo mayor socio del bloque de 28 países.
A pesar de la crisis de la deuda en algunos de los llamados "países periféricos" de Europa, las naciones europeas todavía son un importante mercado de exportación y fuente de inversión y tecnología para China.
Además de establecer una asociación estratégica integral con las naciones de Europa Occidental, China también está promoviendo la cooperación con los países de ECO, los cuales son llamados la "Nueva Europa" por los medios y analistas occidentales.
Los países de ECO, principalmente las economías emergentes que tienen un PIB per cápita similar al de China, también se encuentran en una etapa crucial de la transición a una economía de mercado y su desarrollo social y económico tiene una urgente necesidad de tecnología avanzada y fondos.
Debido a que China y estos países comparten amplios intereses, las partes han gozado de buenas posibilidades para una cooperación de beneficio mutuo en ámbitos como el de infraestructura, finanzas y economía verde.
Debido a las preocupaciones en torno a los asuntos geopolíticos y de seguridad y a un posible impacto sobre la integración europea, los países de Europa Occidental, o la llamada "Vieja Europa", podrían estar preocupados por la cooperación entre China y la "Nueva Europa".
Sin embargo, debe observarse que la cooperación pragmática entre China y las naciones de ECO en el ámbito económico no sólo es transparente, sino inclusiva.
China y los países de Europa Occidental han aprovechado sus respectivas ventajas y se han coordinado en el fomento del desarrollo de los países de ECO.
Tal como los analistas internacionales lo plantean, la ampliación de la cooperación entre China y las naciones de ECO ayudará a impulsar la cooperación entre el país asiático y el continente entero y acelerará el desarrollo general y equilibrado de los lazos China-Europa.
China siempre ha apoyado la integración europea y una Europa unida y poderosa no sólo favorece el interés del continente, sino también de la nación asiática.