Lanzhou,28/08/2013(El Pueblo en Línea)- En las regiones con alta concentración de población tibetana se están construyendo hogares de ancianos para proporcionar alojamiento y cuidado para las personas mayores, y ofrecer comodidad a muchos que antes vivían solos en condiciones de carencia.
Lozang es uno de los beneficiados. Sentado junto a la puerta de su casa, tranquilamente hace girar una rueda dorada de rezo. Dos ancianas tibetanas están junto a él, bebiendo té de mantequilla de yak.
Antes de mudarse al Hogar de Ancianos Rural Central del condado de Xiahe, en la provincia de Gansu, en el noroeste de China, Lozang vivía solo, a veces en un establo.
“Toda mi vida no tuve familia”, dijo el anciano de 73 años de edad. “Solía pastorear el rebaño para otros cuando era joven, pero ahora soy demasiado viejo”.
Con poca propiedad o posesiones, el pastor jubilado vivía en su cabaña con una cama, unas cuantas sillas y utensilios de cocina. Él solía dormir en un establo, porque le era más fácil para ir al baño durante la noche.
Muchos tibetanos tradicionalmente llevan una vida nómada. Las personas mayores suelen ser dejados solos en tiendas de campaña, cuando los jóvenes salen de pastoreo. En ciertas condiciones extremas, los nómadas ancianos son encontrados muertos en casa debido a alguna enfermedad o por las bajas temperaturas
El año pasado, Lozang solicitó mudarse al hogar de ancianos, un patio de 4.000 metros cuadrados a los pies de una colina cubierta de césped. Quería una vida mejor.
El asilo fue construido en 2008 y ahora alberga a 14 tibetanos ancianos.
“Por fin me siento establecido y tengo una casa acogedora”, dijo Lozang, que tiene una habitación de 20 metros cuadrados.
Sobre la mesa de su habitación hay una bandeja con manzanas y peras. Rara vez come la fruta, porque prefiere el yogur.
“El cocinero sabe que a los tibetanos nos encanta el yogur y nos trae yogur y zanba todos los días”, dijo Lozang.
Zanba es una comida tradicional tibetana hecha de harina de cebada frita.
En su tiempo libre, también mira los noticieros tibetanos en su televisor a color de 21 pulgadas.
El gobierno local proporciona 2.600 yuanes (424,8 dólares) para el cuidado de cada residente.
El condado de Xiahe cuenta ahora con cuatro de estos hogares de ancianos, que albergan a un total de 50 tibetanos mayores, y se están construyendo tres mas.
La prefectura autónoma tibetana de Gannan, que administra el condado de Xiahe, ha construido 31 asilos de ancianos en el campo, con camas para más de 1.000 personas. Hasta el momento, 333 personas viven en los hogares, la mayoría de los cuales son tibetanos.
Paldron, la residente más anciana del asilo, dijo que le encanta el lugar, porque hay templos muy cerca para ir a visitar.
Con sólo 1 yuan para el taxi, la anciana de 86 años de edad asiste al rezo en el Monasterio de Labrang, a 5 kilómetros de distancia. Este monasterio es uno de los mayores templos del budismo tibetano.
Unos 400.000 creyentes del budismo tibetano viven en Gannan.
Zhang Gaquan, director de la Oficina de Asuntos Civiles del Condado de Xiahe, dijo que los hogares de ancianos estaban ubicados lo más cerca posible de los templos, con el fin de facilitar las actividades religiosas.
Aunque los tibetanos están teniendo una mejor situación y muchos optan por asentarse en un lugar, Ren Limin, vicedirector de la Oficina de Asuntos Civiles de Gannan dijo que “su sentido de la responsabilidad por cuidar de las personas mayores sigue siendo relativamente débil”.
“Los asilos florecientes les dan a los ancianos tibetanos, especialmente a los pobres, una nueva elección para pasar el resto de sus vidas”, agregó.
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