DAR ES SALAAM, 16 mar (Xinhua) -- Numerosas rondas de aplausos entusiastas resonaron el lunes en el Centro Internacional de Convenciones Julius Nyerere en la ciudad tanzana de Dar es Salaam.
Fue en el citado auditorio en el que el presidente chino, Xi Jinping, de visita en el país, pronunció un discurso dirigido al nutrido público, elogiando los esfuerzos conjuntos para cimentar los lazos sino-africanos y exponiendo el camino a seguir para la futura cooperación entre las dos partes.
"Con una fuente, el río fluye profundo", dijo Xi, citando un viejo proverbio africano, y en referencia a la amistad sino-africana, que fundó su origen en el movimiento de liberación nacional africano después de la Segunda Guerra Mundial, y ha pasado desde entonces las pruebas del tiempo basándose en el respeto y el apoyo mutuos.
Los chinos todavía recuerdan el firme apoyo de las naciones africanas, que ayudaron a China a recuperar su membresía en la Organización de Naciones Unidas y un puesto permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU en 1971.
El mismo año, 60 trabajadores chinos perdieron sus vidas en misiones de ayuda en Tanzania.
La historia ha sido testigo de la amistad entre China y Africa, la cual ha sentado con el tiempo una base sólida de su cooperación.
Las relaciones entre China y el continente africano han entrado en "una vía rápida de desarrollo integral", afirmó Xi, elogiando los esfuerzos conjuntos realizados por ambas partes.
El comercio en ambas direcciones se disparó hasta casi 200.000 millones de dólares en 2012, desde los 10.600 millones de dólares registrados hace 12 años.
La inversión directa de China en dicho continente superó los 15.000 millones de dólares a finales de 2012.
Entre los lazos que unen a China y a Africa, en palabras de Xi, se encuentran "no solo la profunda amistad tradicional y los estrechos lazos en intereses comunes, sino también nuestros respectivos sueños".
En un mundo globalizado, el sueño chino de rejuvenecimiento nacional y la aspiración de Africa al desarrollo ya han estado interconectadas, con cada parte ofreciendo nuevas oportunidades para la otra.
Los países africanos están ansiosos por aprovechar la experiencia de China y rediseñar su modelo de desarrollo, que actualmente depende mucho de la exportación de recursos naturales y materias primas.
Por su lado China espera aprovechar las oportunidades derivadas del desarrollo de Africa.
De hecho, la cooperación en beneficio mutuo entre China y Africa no solo traerá beneficios tangibles a las dos partes, si no también al mundo en desarrollo en conjunto.
El discurso de 30 minutos de Xi provocó decenas de rondas de calurosos aplausos, atestiguando elogios a la amistad entre China y Africa, el reconocimiento de la relación mutuamente beneficiosa y, lo que es más importante, las grandes expectativas sobre el futuro de su cooperación.