Hacia una muela inteligente para luchar contra el párkinson |
(El Pueblo en Línea) ,26/03/2013-Cada año se detectan unos cuatro millones de casos de Parkinson en el mundo. Los medicamentos actuales no curan ni frenan la enfermedad, sólo alivian sus síntomas. El tratamiento más activo, la levodopa, pierde efectividad con el paso de los años y los pacientes entran en los llamados periodos off, en los que la medicación no sirve para nada. Los médicos se ven obligados a aumentar las dosis y la propia levodopa causa entonces trastornos psíquicos y caídas de la presión arterial con desmayos.
Según publica el sitio especializado Es Materia, hace seis meses, Rovira levantó en Eindhoven, Países Bajos, el premio al "proyecto más prometedor" del programa europeo AAL , en el que 23 países buscan mejorar la calidad de vida de las personas mayores mediante la tecnología. Rovira, responsable de proyectos de telemedicina en Telefónica Digital, ha coordinado el proyecto HELP, que implica a varias empresas e instituciones europeas.
La iniciativa consiste en un sensor que detecta los síntomas del párkinson y avisa a una bomba de fármaco subcutánea para que aumente o disminuya el tratamiento. El proyecto, además, ha probado una muela falsa capaz de liberar medicamento de manera constante, que podría sustituir a la incómoda bomba subcutánea.
Para sortear los problemas de las pastillas contra los síntomas del párkinson, los neurólogos ya cuentan con bombas que suministran una dosis constante de medicamento a los enfermos, ya sea debajo de la piel mediante un catéter o directamente en el duodeno, la porción del intestino delgado que se conecta al estómago. Unas 100.000 personas en el mundo llevan la bomba duodenal, frente a 50.000 que cuentan con la subcutánea.
El proyecto coordinado por el ingeniero español Jordi Rovira logró probar un sensor, creado por el Centro de Atención a la Dependencia de la Universidad Politécnica de Cataluña, acoplado a un cinturón de neopreno, que se coloca en la cintura del enfermo de párkinson. Cuando el sensor detecta el temblor en reposo, y a través de una aplicación del teléfono móvil del paciente, una bomba subcutánea suministra la dosis exacta de medicamento para paliar los síntomas. Los médicos han supervisado en todo momento el proceso en tiempo real, aunque el objetivo es que en un futuro sea automático. Los investigadores del proyecto HELP lo llaman "el primer marcapasos contra el párkinson".
Todavía es ciencia ficción, pero Rovira cree que sería "perfectamente realizable desde el punto de vista técnico" unir el sensor y el diente para desarrollar una muela inteligente capaz de detectar los síntomas del periodo off y suministrar la dosis exacta de medicamento para neutralizarlos. Ya ha habido "conversaciones informales" entre las empresas implicadas para estudiar la viabilidad de la idea. "El objetivo es que los pacientes se olviden de la enfermedad", declara el ingeniero.