El gobierno central de China asignó por primera vez 200 millones de yuanes (32,08 millones de dólares) a las organizaciones no gubernamentales (ONGs) en 2012.
Con estos fondos se llevaron a cabo 377 proyectos de servicios sociales y más de 120 programas de formación, beneficiando directamente a 1,85 millones de personas y formando a otras 17.700, según el departamento del Ministerio de Asuntos Civiles que se encarga de la administración de las ONGs.
Los proyectos contaron con una inversión total de 320 millones de yuanes, de acuerdo con la misma fuente.
En los últimos años, el gobierno chino ha tomado una serie de medidas para impulsar el desarrollo de las organizaciones sociales y fomentar el papel que desempeñan.
En 2011, el gobierno central lanzó un proyecto piloto para simplificar el registro de las organizaciones sociales. En la actualidad, estas organizaciones pueden acudir directamente a las autoridades de asuntos civiles sin necesidad de buscar previamente un patrocinador administrativo.
Las antiguas reglas dificultaban el registro de las organizaciones sociales, ya que a menudo los administradores se mostraban reacios a asumir la responsabilidad del patrocinio. Como consecuencia, muchas de estas organizaciones llevaban a cabo sus actividades sin haberse registrado.
La práctica del "registro directo" se ha extendido hasta ahora a 19 provincias.
Además, algunas provincias han relajado el control sobre el registro de las fundaciones privadas, las cámaras de comercio foráneas y las entidades privadas no empresariales que realizan actividades relacionadas con asuntos exteriores.