WASHINGTON, 16 mar (Xinhua) -- El presidente Barack Obama dijo hoy que Estados Unidos no reconocerá el referendo realizado en Crimea y prometió imponer nuevas sanciones sobre Rusia.
En su conversacion telefónica con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, el líder estadounidense indicó que la votación llevada a cabo en la república autónoma de Ucrania violó la constitución de Ucrania y fue realizada "bajo coacción de la intervención militar rusa", indicó la Casa Blanca en una transcripción de la conversación.
El plebiscito, en el cual, según los resultados preliminares, 95,5 por ciento de los votantes eligieron volver a unirse a Rusia, "nunca será reconocido por Estados Unidos ni por la comunidad internacional", agregó Obama.
Obama le dijo a Putin que "las acciones de Rusia violaron la soberanía y la integridad territorial de Ucrania y que, en coordinación con nuestros socios europeos, estamos listos para imponerle costos adicionales a Rusia por sus acciones".
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, amenazó el jueves con imponer desde el lunes "un conjunto de serias medidas" junto con la Unión Europea contra Rusia dependiendo de las próximas acciones rusas.
Washington canceló las negociaciones comerciales y los intercambios militares con Rusia y Obama autorizó prohibiciones de visado y el congelamiento de los bienes de algunos rusos y ucranianos acusados de la toma militar de Crimea por parte de Rusia.
Sin embargo, Putin dijo a Obama que la votación realizada hoy en Crimea se apegó totalmente al derecho internacional, de acuerdo con la transcripción de la conversación telefónica por parte del Kremlin. Putin dijo horas antes por teléfono a la canciller alemana Angela Merkel que Rusia "respetará la elección" de la población de Crimea.
Obama enfatizó que "todavía queda una vía clara" para solucionar la crisis de manera diplomática, en una forma en "que aborde los intereses tanto de Rusia como del pueblo ucraniano".
Washington y sus aliados han estado presionando a Moscú para que retire su personal militar de las bases en Crimea, sede la flota rusa del Mar Negro, permita los observadores internacionales en Crimea y se mantenga abierto al diálogo con el gobierno ucraniano.
Obama reiteró que "una solución diplomática no puede ser lograda mientras las fuerzas militares rusas continúen sus incursiones en territorio ucraniano y que los ejercicios militares rusos a gran escala en la frontera con Ucrania sólo exacerba las tensiones", indicó la Casa Blanca.
Los dos presidentes acordaron seguir trabajando juntos para encontrar una solución diplomática, agregó el Kremlin.
Horas antes, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, confirmó hoy en una conversación telefónica con el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, que la posición de Moscú sobre el referendo en Crimea se mantiene sin cambios. Lavrov exhortó a la parte estadounidense a ejercer toda su influencia sobre las autoridades de Kiev para "detener la anarquía y arbitrariedad masivas contra la población rusoparlante".
Crimea, históricamente parte de la Federación Rusa, fue transferida a Ucrania en mayo de 1954, entonces una república de la Unión Soviética.