Pekín, 17/12/2013(El Pueblo en Línea)-Las organizaciones no gubernamentales de China están extendiendo una mano a los países pobres de África y del sudeste asiático, un movimiento que los observadores ven una eficaz asistencia para el desarrollo del gobierno en el extranjero.
Daofeng, presidente ejecutivo de la Fundación de China para Reducir la Pobreza, dijo que su organización dibujó su ruta de internacionalización en 2007 tras darse cuenta de que China está cambiando de destinatario a país donante gracias a su rápido crecimiento económico de las últimas tres décadas.
"En los próximos diez años, apenas habrá pobreza en China, y podemos predecir que cada vez más chinos estarán encantados de donar a aquellos que lo necesiten en el extranjero", dijo a los reporteros el lunes después de pronunciar un discurso en un foro sobre responsabilidad social internacional en la Universidad de Pekín.
Desde 2005, la fundación ha gastado unos 72 millones yuanes (11,9 millones de dólares) en programas de ayuda en más de diez países, incluyendo Myanmar, Sudán y República Democrática Popular de Corea, según la organización.
La fundación ofrece fuentes de donaciones y ayuda a países afectados por desastres naturales, dijo.
"Elegimos países de destino para proyectos a largo plazo donde haya muchas empresas chinas y muchos chinos trabajando, lo que ayuda a nuestra recaudación de fondos", dijo.
La fundación da prioridad a proyectos que puedan resolver las cuestiones más importantes para los receptores de ayuda. Por ejemplo, su organización lanzó un programa de salud en 2012 en Sudán en el que enviaron médicos voluntarios de China para entrenar a enfermeras y comadronas locales debido a la alta tasa de mortalidad de madres y recién nacidos.
También reveló que el ministerio de Comercio y la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma han discutido la futura cooperación con África y el sudeste asiático.
Liu Hongwu, profesor del Instituto de Estudios Africanos de la Universidad Normal de Zhejiang, dijo que la ayuda oficial de China para los países en vías de desarrollo tiene ventajas aunque el tamaño de la ayuda exterior de China es comparativamente pequeño.
La ayuda extranjera de China en los últimos sesenta años ha sido alrededor de una décima parte de la ayuda de Estados Unidos en el mismo período, dijo.
"Los países occidentales donantes están interesados en la promoción de la democracia, derechos humanos y sistema parlamentario, mientras que China presenta un modelo más igualitario y mutuamente beneficioso en términos de ayuda en el extranjero", dijo.
Sin embargo, la ayuda externa del gobierno de China tiene desventajas, incluyendo la baja eficiencia del uso de esos fondos y la pobre participación de las comunidades locales, dijo.
Deng Guosheng, director del Centro de Investigación de ONGs de la Universidad de Tsinghua, dijo que las organizaciones no gubernamentales de China pueden jugar un papel más importante en la ayuda extranjera. Las donaciones públicas alcanzaron los 81.700 millones de yuanes y cada una de las cuarenta y siete fundaciones caritativas recaudó más de 100 millones de yuanes desde 2012.