SANTO DOMINGO, 13 sep (Xinhua) -- La jefa de la Misión de la ONU para la Estabilización de Haití (Minustah), Sandra Honoré, advirtió hoy sobre la vulnerabilidad del proceso democrático en este país, a cuyas autoridades pidió continuar el diálogo para garantizar la estabilidad y procurar el desarrollo del pueblo haitiano.
En su primera conferencia de prensa desde que llegó a Puerto Príncipe en julio pasado, Honoré señaló que "en el actual clima de polarización" la misión reitera su llamado a los principales actores políticos haitianos para promover un diálogo "sereno" que permita lograr un consenso mínimo sobre el camino a seguir, especialmente con relación a las elecciones que deben realizarse este año.
"El diálogo y el consenso entre los haitianos es un factor esencial para dar respuestas concretas a los muchos retos que hay que superar, y para permitirle a este país romper la crisis institucional cíclica que lo caracteriza y que con frecuencia lo ha paralizado", manifestó la representante especial del secretario general de las Naciones Unidas.
Haití está llamado a elegir a un tercio del Senado (diez legisladores), además de 142 concejales y 570 asambleístas locales en todo el país.
El proceso sufrió meses de retraso por pugnas entre el Ejecutivo y el Legislativo sobre la conformación del tribunal electoral, y luego por diferencias en cuanto a la ley que debe servir como base para llevar a cabo las elecciones.
El presidente haitiano Michel Martelly pidió el pasado miércoles a la Organización de Estados Americanos (OEA) el envío de una misión al país para que evalúe la viabilidad de los comicios, en momentos en que aumentan los reclamos de la oposición para que se cumpla el proceso.
La jefa de la Minustah dijo hoy que saluda los esfuerzos y logros significativos que se han hecho en las últimas décadas para llevar a Haití por el camino de la consolidación democrática, pese a las dificultades que han acompañado a esta transición.
Sin embargo, Honoré agregó que así como el organismo reconoce la "complejidad y los desafíos" que enfrenta Haití, también observa la necesidad de una mayor estabilidad política, por lo que exhorta a todas las partes a continuar el diálogo para garantizar que el proceso democrático continúe en "interés del pueblo haitiano".
La representante destacó avances concretos como la reforma de la policía nacional y la adopción de legislaciones claves y el establecimiento de organismos esenciales para la institucionalidad del país, pero advirtió que el país debe seguir trabajando para fortalecer el "respeto del Estado de derecho, el respeto por los demás, la tolerancia y los derechos humanos".
"Queda mucho por hacer", dijo Honoré.
En una reciente reunión en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, Honoré ya había dicho que está preocupada por el retraso en los comicios y por la tensión en las relaciones entre el Ejecutivo y el Legislativo que amenazan con poner en peligro los avance logrados a favor de la estabilización del país.
Partidos políticos, organizaciones defensoras de los derechos humanos y figuras de la sociedad civil, además de diplomáticos de varios países y representantes de organismos internacionales, han pedido al gobierno y al Parlamento que adopten medidas que garanticen la realización de los comicios.
El proceso está estancado en el Senado de la República, adonde esta semana fue enviado un proyecto de ley que debe permitir la convocatoria de las elecciones parciales.
La iniciativa, elaborada por el órgano electoral, fue votada primero por la Cámara de Diputados, en medio de una controversia por un artículo que establece el final del mandato en el 2015 de los senadores elegidos en el 2009, pese a que la ley electoral vigente desde el 2008 establece el fin del mandato del segundo tercio del Senado el segundo lunes de enero del 2014.
La nueva jefa de la Misión de la ONU inició su mandato el 15 de julio pasado, con el compromiso de apoyar al país en el reforzamiento de la seguridad y el Estado de derecho, y de trabajar estrechamente con el gobierno haitiano.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon designó a la diplomática trinitense de 58 años en sustitución del chileno Mariano Fernández, quien culminó su misión en enero de este año, aunque el cargo era ocupado temporalmente por el canadiense Nigel Fisher.
El 12 de agosto pasado, Ban anunció el nombramiento del holandés Peter de Clercq como nuevo coordinador residente del organismo mundial en Haití, y subjefe de la Minustah.
La misión, que actualmente lleva a cabo una reducción de sus efectivos en Haití, fue establecida el 1 de junio del 2004 por una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
El organismo sucedió a una Fuerza Multinacional Provisional autorizada por el organismo mundial en febrero de ese año, después de la partida al exilio del entonces presidente Jean Bertrand Aristide.