Un total de siete personas perdieron la vida, y otras cuatro permanecen desaparecidas, cuando un grupo de militantes armados atacaron una central eléctrica en la ciudad noroccidental paquistaní de Peshawar hoy martes, dijo la policía.
Irfan Gul, oficial de policía, dijo que el ataque fue perpetrado por más de 40 militantes que entraron en el edificio de la central eléctrica antes del amanecer derribando los muros exteriores con granadas propulsadas por cohetes.
Tras el ataque inicial comenzó un fuerte intercambio de fuego, aún así, los militantes consiguieron matar a dos personas y secuestrar a otras nueve, detalló la misma fuente.
Esta misma mañana, la policía recuperó los cuerpos de cinco desaparecidos en campos cercanos situados a media milla de la central eléctrica, mientras que cuatro personas permanecen desaparecidas.
La policía aseguró que los muertos incluyen a tres policías y a cuatro empleados de una compañía eléctrica estatal.
Los militantes también se llevaron cuatro transformadores y cinco vehículos, e incendiaron la central en retirada.
El suministro de electricidad de la ciudad se ha visto interrumpido ya que la central ha quedado completamente siniestrada tras el ataque.
Hasta el momento ningún grupo ha reivindicado el ataque.
El incidente ocurrió en el área de Badaber, en los suburbios de Peshawar, la ciudad capital de la provincia noroccidental de Khyber Pakhtunkhwa, que a menudo es objetivo de ataques por parte de militantes debido a su proximidad con el territorio sin ley del cinturon tribal.