Grecia comenzó hoy una nueva ronda de negociaciones con auditores de la Unión Europea (UE) y acreedores del Fondo Monetario Internacional (FMI), quienes determinarán la liberación del próximo paquete de rescate para Atenas este mes.
El ministro griego de Finanzas Yannis Stournaras sostuvo en su oficina en Atenas la primera reunión con dos de los jefes de los representantes de la "troika", con lo que se dio inicio a una serie de deliberaciones hasta el 10 de marzo. La reunión tiene lugar en el contexto de una revisión regular sobre el progreso que Grecia bajo el programa de rescate que acordó con los acreedores internacionales desde hace 2010.
"El entorno (de las conversaciones) fue muy positivo. Reconocieron los esfuerzos que hemos dedicado en los últimos meses", dijo Stournaras tras la cita.
Funcionarios del gobierno griego revelaron que esta vez la agenda se concentró en asuntos delicados como la reducción en 150.000 el número de funcionarios públicos para 2015, la alta tasa de desempleo, la recaudación de ingresos, la reforma al sistema tritutario para contener la amplia evasión de impuestos, las privatizaciones y la actual recapitalización bancaria.
Los acreedores internacionales mantienen a flote a la endeudada Grecia ofreciéndole multimillonarios préstamos de rescate para evitar una caótica suspensión de pagos en la zona euro a cambio de un rígido programa de austeridad y reforma. Ellos han presionado por medidas más rápidas, porque Atenas se ha rezagado en plazos como en los objetivos establecidos.
Bajo una fuerte carga de una aguda recesión económica por sexto año, así como a la históricamente alta tasa de desempleo, que ha alcanzado el 27 por ciento, las autoridades griegas piden un respiro para prevenir posibles disturbios sociales.
Los ciudadanos griegos han sufrido varias rondas de recortes en salarios y pensiones y el aumento de hasta el 40 por ciento en la tasa de impuestos sobre ingreso en tres años.
"No puede haber despidos", dijo Stournaras a la prensa local este fin de semana, en referencia a la presión sobre el recorte de puestos de trabajo en el sector público. Explicó que a lo largo de los últimos dos años, el sector ha recortado unos 75.000 empleos a través de jubilación. En su opinión, la tasa de jubilación y el actual esquema de movilidad cumplirán sus metas para el 2015.