El jefe de Carabineros de Chile, Gustavo González, negó hoy la implicación de personal de esa corporación en el asesinato del activista mapuche Rodrigo Melinao, cuya familia acusa del crimen a esa policía militarizada.
"De acuerdo con los antecedentes proporcionados, no hay utilización de armamento ni procedimiento policial de Carabineros que vincule (a la corporación) con este hecho -por supuesto- lamentable de la muerte de una persona", señaló González.
"Yo no me voy a referir a juicios de valor que haga la familia u otra persona de este tema", respondió el funcionario a periodistas, que aludieron a las denuncias de la familia del activista indígena.
Melinao fue asesinado con un disparo de escopeta durante la mañana del martes en la comuna de Ercilla, en la región de La Araucanía al sur del país.
La familia del dirigente señaló a policías como posibles autores del homicidio.
El asesinato de Melinao desató protestas en Santiago y en la ciudad de Temuco, capital de la región de la Araucanía.
Sobre Melinao pesaba una condena por la quema de un predio, en el contexto del conflicto que viven comunidades inigenas con el Estado chileno por la devolución de sus tierras ancestrales.
No obstante, Melinao realizó una presentación ante la Corte Suprema alegando inocencia, esgrimiendo que fue acusado en virtud de la polémica Ley Antiterrorista, que incluyó el testimonio de testigos ocultos.
El gobierno garantizó la máxima celeridad en la investigación ante el revuelo acusado por su muerte.
El relator especial de Naciones Unidas, Ben Emmerson, de visita en el país la semana pasada, fustigó en duros términos la aplicabilidad de la polémica normativa para enfrentar la problemática indígena en Chile.