Bolivia aspira y busca relaciones diplomáticas y comerciales con todos los países del mundo basadas en el respeto mutuo y sin imposiciones ni injerencias, dijo hoy el canciller boliviano David Choquehuanca.
"Como país somos dignos y no podemos permitir injerencias, por eso es fundamental que las naciones se respeten mutuamente, esa es la política del gobierno del presidente Evo Morales", afirmó a periodistas el ministro de Relaciones Exteriores.
De esta manera se refirió a la decisión de su gobierno de expulsar de Bolivia a la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a la cual acusó de injerencia política.
Choquehuanca dijo que los embajadores bolivianos son las personas responsables de construir las buenas relaciones de respeto ni de sometimiento.
"Los diplomáticos son los responsables de tender puentes para que podamos conocerlos, para que podamos identificar potencialidades de cómo nos podemos ayudar entre países hermanos", agregó el canciller boliviano.
El gobierno de Bolivia recordó que se abrió a las relaciones con Irán, pese a la resistencia de Estados Unidos por considerarlo como un país inamistoso.
El mandatario Evo Morales manifestó en reiteradas oportunidades que su país es "digno" por decisión de su gobierno y su pueblo, por lo cual no puede estar sujeto a imposiciones de Estados Unidos para tener relaciones con otros países.
Por su parte, el diputado del gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS), Galo Bonifaz, aseguró que la línea política de Bolivia es la dignidad y por tanto no puede tolerar injerencia de ninguna nación.
Si algún país quiere cooperar con Bolivia, bienvenido, pero con base en las reglas y leyes internas que rigen en el país, afirmó el asambleístas oficialista.
Bonifaz respaldó la decisión del gobierno del presidente Morales de expulsar a la USAID con el argumento de que ejercía políticas de injerencia en Bolivia desde la década de los 60 del siglo pasado hasta la fecha.