El presidente de Paraguay, Federico Franco, solicitó este viernes que el recuento de votos de las recientes elecciones venezolanas "tenga la suficiente transparencia" y calificó la situación que vive ese país de "lamentable".
"No puede ser que unas elecciones culminen sin que se haga una auditoría y un escrutinio de los votos, por lo que reclamamos que Venezuela pueda honrar este compromiso y de esa manera definir su presidente", aseguró Franco este viernes en Coronel Oviedo, a unos 130 kilómetros de Asunción, en un acto oficial para inaugurar un estadio de fútbol.
Las declaraciones del actual presidente paraguayo tuvieron lugar el mismo día en que Nicolás Maduro tomó posesión como nuevo mandatario de Venezuela.
Maduro es considerado persona "non grata" en Paraguay desde la destitución en junio del año pasado del entonces presidente Fernando Lugo.
El nuevo presidente venezolano, quien ocupaba entonces el cargo de ministro de Exteriores, se encontraba en Asunción como miembro de la misión de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) que intentó mediar en la crisis abierta por el proceso contra Lugo, y fue acusado por Paraguay de "injerencia" en los asuntos internos del país.
El conflicto diplomático entre los dos países se saldó con la expulsión de los diplomáticos de uno y otro país, así como la suspensión de Paraguay del Mercosur y Unasur, mientras que Venezuela entró en el Mercosur, ingresó al que siempre se había opuesto el gobierno de Asunción.
"Hoy, para seguir demostrando que teníamos razón y que estábamos en el camino correcto, se presenta esa situación lamentable en Venezuela", apuntó Franco tras recordar el "trato absolutamente injusto" dado a su país durante el conflicto por la destitución de Lugo.