Legisladores oficialistas uruguayos anunciaron hoy que el proyecto para legalizar la marihuana establecerá que el Estado controle la distribución del estupefaciente pero no lo produzca, como se indicaba originalmente.
"El control estatal es imperioso, la producción no", afirmó el diputado de la coalición gobernante Frente Amplio (FA) Julio Bango, uno de los impulsores de la iniciativa que es estudiada en una comisión parlamentaria.
El presidente José Mujica sorpendió a la sociedad uruguaya en 2012 al promover la legalización del consumo de la marihuana, al considerar como un fracaso la política represiva contra el narcotráfico.
Según el proyecto original, el Estado asumiría "el control y la regulación de las actividades de importación, producción, adquisición a cualquier título, almacenamiento, comercialización y distribución de marihuana o sus derivados".
El cambio se realizará para que el proyecto obtenga la mayoría necesaria en ambas cámaras del Congreso.
Bango dijo a la radio local El Espectador que con esta modificación "se eliminaría parte de la potestad del Estado para la producción, nada de lo otro referido al control".
"El monopolio del Estado es para regular y controlar pero, de esta forma, se deslindaría la posibilidad de ejecutar. Se tendría el monopolio de la regulación y control, y también del otorgamiento de licencias", afirmó Bango.
El legislador enfatizó que "el fundamento de la iniciativa no es que el Estado plante marihuana sino cómo lograr, controlando, que se den las condiciones para que en toda la cadena nos aseguremos la protección del daño".
En tanto, un senador del FA, Luis Gallo, aseveró que "hay una cosa (en la) que estamos todos de acuerdo, y es que el Estado no debe integrarse a lo que significa la producción".
El texto habilita el autocultivo de marihuana para uso personal.
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