El investigador del Departamento de Islas Malvinas del Instituto de Relaciones Internacionales (IRI) de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), en Argentina, Federico Martín Gomez, afirmó que el referendo que se realiza hoy en ese archipiélago carece de sustento jurídico y es puramente político.
El académico dijo que el objetivo que persiguen las autoridades en las Malvinas con la realización del referendo este 11 y 12 de marzo es fortalecer su vínculo con el Reino Unido, al esgrimir "supuestos derechos a elegir su propio futuro".
Las islas Malvinas fueron ocupadas por el Reino Unido en 1833, y Londres afirma que sus residentes son un territorio británico de ultramar autosuficiente, al que sólo ofrecen ayuda en materia de Defensa y en el manejo de las relaciones exteriores.
Argentina y el Reino Unido fueron a la guerra en 1982 por el archipiélago, conflicto que se extendió del 2 de abril al 14 de junio de ese año, lapso en el cual murieron 649 soldados argentinos, 255 militares británicos y tres isleños.
Gómez explicó en entrevista con Xinhua que la consulta es claramente una jugada política para mantener el "status quo" en el Atlántico Sur y la presencia británica en el archipiélago.
En ese contexto, destacó que el gobierno de la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, ha desconocido el referendo desde el momento en que fue anunciado, por lo tanto también desconocerá el resultado de esa consulta popular entre británicos residentes en las islas Malvinas.
"El impacto inmediato (de la consulta) será meramente mediático y no llegará más allá de la proyección que alcance en los medios masivos de comunicación", opinó Gómez.
El especialista resaltó que para el Reino Unido y para los isleños mismos es rentable el estatus político actual de "Territorios de Ultramar británicos".
"Argentina, al desconocer todo el proceso, no ejerce un sustento o basamento sobre el mismo, por lo cual las dos partes involucradas y reconocidas por la ONU (Organización de las Naciones Unidas) no experimentarán consecuencias directas de carácter político y/o diplomático" por la realización del referendo.
Gómez enfatizó que el referendo, desde una mirada jurídica, carece de todo sustento ya que no es reconocido por ningún organismo internacional y así pasará con el resultado que de la consulta emerja.
"El objetivo (que persiguen sus impulsores) es meramente político para sostener la presencia militar británica en el Atlántico Sur", indicó.
El catedrático señaló que después del referendo y del impacto mediático a corto plazo que éste produzca, la disputa de soberanía argentino-británica continuará en los ámbitos habituales de bilateralidad.
"Argentina continuará con las denuncias sobre la posición británica en el Atlántico Sur y los reclamos para que el Reino Unido cumpla con la resoluciones dictadas por la ONU ante los organismos internacionales" para resaltar la intransigencia inglesa de iniciar el diálogo para resolver el conflicto de las islas Malvinas, agregó.