Los cubanos rememoran hoy la explosión, hace 53 años en la bahía de La Habana, del buque francés "La Coubre", acción calificada de terrorista por las autoridades de la isla y que dejó 101 muertos y 209 heridos.
El barco transportaba alrededor de 1.500 cajas de explosivos, granadas y municiones adquiridas a Bélgica por el naciente gobierno revolucionario cubano.
La administración de Estados Unidos, presidida entonces por Dweigh Eisenhower, ejerció presiones por intermedio de su cónsul y su agregado militar en la nación europea para evitar la venta de armamento a la ínsula.
El 4 de marzo de 1960, a las 15:08, hora local (2008 GMT), se produjo la primera explosión en el carguero y 48 minutos después, la segunda, la cual causó el mayor número de víctimas al ocurrir cuando decenas de personas prestaban auxilio.
En investigaciones realizadas por expertos nacionales y extranjeros se descartó la posibilidad de un accidente, por el tipo de carga, las medidas de seguridad en su embalaje, las adoptadas para la descarga y la pericia y experiencia de los braceros.
De acuerdo con las pruebas, la causa de las explosiones obedeció a un sabotaje preparado en algún punto de embarque o de la travesía.
Se conoció que en el vapor viajaba, sin explicaciones lógicas, un periodista norteamericano llamado Donald Lee Chapman, quien embarcó en Le Havre y se dirigía a Omaha, Estados Unidos, y que la nave hizo escala en Miami sin justificación conocida.
En el sepelio de las víctimas, el 5 de marzo, el ex presidente cubano Fidel Castro pronunció por primera vez la consigna "¡Patria o Muerte!"