El gobierno brasileño prevé pedir a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el bloqueo de una zona de reservas minerales en aguas internacionales del océano Atlántico, a 1.000 kilómetros de la costa de Río de Janeiro, difundió hoy la prensa local.
La intención de las autoridades de Brasil, según publica del diario "Folha de Sao Paulo", es reclamar el derecho de explotación sobre el área de recursos minerales localizada en Elevado Río Grande, una cordillera marítima en aguas brasileñas e internacionales.
Recientemente, la estatal Compañía de Investigación de Recursos Minerales (CPRM, siglas en portugués) hizo un estudio en la zona en el que se comprobó la existencia de rocas sedimentares, minerales ricos e indicios de formación petrolífera.
El director de la CPRM, Roberto Ventura, aseguró que Brasil presentará antes del mes que viene el estudio y el pedido a la Autoridad Internacional de Fondos Marinos (ISBA, siglas en inglés), organismo adscrito a la ONU.
Según él, en la misma zona, Rusia y Francia presentaron pedidos similares ante el organismo internacional para explotar un área muy próxima a la que solicita Brasil.
En caso de recibir la autorización de la ONU, Brasil tendrá 15 años para investigar en los 3.000 kilómetros cuadrados del área y luego podrá abrir un proceso de licitación para la explotación comercial privada con el aval internacional.
En los últimos dos años, el gobierno brasileño invirtió 15 millones de reales (unos 7,5 millones de dólares) para cinco expediciones de investigadores en la zona.