Al menos 15 personas murieron asesinadas y otras 23 resultaron heridas en la ciudad de Sao Paulo y su área metropolitana, en lo que fue la madrugada más violenta desde el relevo del secretario de Seguridad pública del estado más poblado de Brasil la semana pasada.
La Policía informó hoy que la mayoría de los homicidios tienen características de haber sido ejecuciones, con hombres pasando en moto y disparando contra personas que estaban en bares o en la calle.
Las muertes durante la madrugada son superiores a la media de asesinatos diarios que hubo en el mismo mes del año pasado (6,6) y coinciden con la espiral de violencia que asola a la mayor ciudad de Brasil y de América Latina desde inicios de octubre, con cerca de 300 homicidios.
Cinco de las víctimas murieron en Sao Bernardo do Campo, en el cinturón metropolitano de Sao Paulo.
Cuatro de ellas fueron tiroteadas por desconocidos, mientras que una quinta murió apuñalada.
En la ciudad de Osasco, también próxima a Sao Paulo, cuatro personas perdieron la vida, entre ellos un padre y su hijo de cinco años, y 11 resultaron heridas después de que cuatro hombres que pasaron en dos motos dispararon contra al público que había en un bar.
En Diadema, tres personas murieron por tiros efectuados por unos desconocidos que se acercaron a pie, mientras que un bombero resultó herido en el intento de asalto a un supermercado que pretendían realizar dos bandidos.
Ya en la capital paulista, tres sospechosos murieron en un tiroteo con la policía, tras haber asaltado una casa disfrazados como miembros de una banda de música.
La ciudad de Sao Paulo vive una ola de violencia que hizo aumentar en 48 por ciento el número de homicidios en octubre, según datos de la Secretaría de Seguridad Pública.
Las autoridades atribuyen el aumento de violencia a la banda criminal Primer Comando de la Capital (PCC), que estaría vengándose así de acciones policiales contra sus miembros e intereses.
Desde inicios de año, 93 policías ya han muerto en el estado de Sao Paulo, la mayoría de ellos cuando estaba fuera de servicio.
El aumento de la violencia hizo que el gobernador Geraldo Alckmin decidiera destituir esta misma semana al secretario de Seguridad Pública, Antonio Ferreira Pinto, quien será sustituido por Fernando Grella Vieira.
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