La capital de Argentina y las principales ciudades del país fueron hoy casi paralizadas por un paro nacional que desarrollan tres de las cinco centrales sindicales argentinas para protestar por la alta inflación y el esquema fiscal que castiga al sector obrero del país, confirmaron organizadores de la jornada.
La acción fue calificada "masiva" y con mucha más adhesión "de lo que preveíamos", dijeron los dirigentes Hugo Moyano, titular de la Confederación General del Trabajo (CGT) y del Sindicato de Camioneros, (peronista); Pablo Micheli, titular de la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA), y, Luis Barrionuevo, de la CGT Azul y Blanca.
Los medios de prensa destacaron la protesta, la primera que se realiza en contra de las políticas gubernamentales desde 2003.
La TV estatal mantuvo sus programas habituales, pero las estaciones televisivas privadas enfrentadas con el Gobierno dan cuenta de la efectividad de la medida de fuerza en tanto que otros canales, también privados aunque sin mirada crítica hacia el gobierno, emiten informes especiales sobre el patrimonio de los dirigentes obreros.
Otros reportes destacaron hechos de violencia con "amenazas a bares y restaurantes" y la denuncia del secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, quien asegura que se han producido"ataques a medios de transportes, colectivos y trenes".
Fernández asegura que "pese a que queremos salir a trabajar no podemos hacerlo por los piquetes que cortan calles y rutas".
Un elevado número de comercios permanecen cerrados, mientras que las estaciones de servicio no expenden combustibles y los supermercados operan aunque con poca demanda, constató esta agencia.
La presidenta Cristina Fernández demandó a través de su cuenta de Facebook "responsabilidad" a los trabajadores que reclaman contra la inflación que este año se proyecta hasta del 24 por ciento, según estudios privados y para que se modifique el esquema de impuestos que tributan los empleados.
"Quiero convocar a mis compañeros los trabajadores a un gran ejercicio de responsabilidad en la defensa no del Gobierno, sino del proyecto político que ha generado más de 5 millones y medio de puestos de trabajo", escribió en las primeras horas de este martes la jefa de Estado en su perfil en FB.
Desde esa plataforma interrogó a los que adhieren a la medida de fuerza acerca de si "alguien quiere volver a la forma de acumulación que es pan para unos pocos hoy y hambre para todos mañana o para casi todos".
Señaló que "todos sabemos que hambre todos, lo que se dice todos, nunca han pasado en la Argentina" y recordó que "normalmente, los primeros que pasan hambre son los que se quedan sin trabajo, que son los trabajadores".
El Ministerio de Trabajo, a través de un comunicado oficial, exhortó a "no obstaculizar" a quienes quieran llegar a sus puestos habituales de labores.
La huelga finalizará a las 24:00 hora local (03:00 GMT).