La presidenta argentina, Cristina Fernández, pidió hoy "responsabilidad" a los trabajadores, que iniciaron este martes un paro de actividades por 24 horas para demandar un plan de control de la inflación y cambios al esquema impositivo vigente al trabajo.
"Quiero convocar a mis compañeros los trabajadores a un gran ejercicio de responsabilidad en la defensa no del Gobierno, sino del proyecto político que ha generado más de 5 millones y medio de puestos de trabajo", escribió la mañana del martes la jefa de Estado en la red social Facebook.
La jefa de Estado se preguntó allí si "alguien quiere volver a la forma de acumulación que es pan para unos pocos hoy y hambre para todos mañana o para casi todos".
"Todos sabemos que hambre todos, lo que se dice todos, nunca han pasado en la Argentina. Normalmente, los primeros que pasan hambre son los que se quedan sin trabajo, que son los trabajadores", afirmó.
El Ministerio de Trabajo exhortó esta mañana mediante un comunicado a "no obstaculizar" a quienes quieran llegar a sus puestos habituales de labores.
"El derecho a huelga está plenamente garantizado. De la misma manera, y en conocimiento de que se han planificado cortes de rutas y bloqueos, se exhorta a los organizadores de esta medida a que no obstaculicen a los trabajadores que quieran realizar sus tareas habituales", dijo.
Si bloquean los accesos para quienes quieran presentarse a trabajar "estarían afectando el derecho constitucional de trabajar", indicó la cartera que conduce el ministro Carlos Tomada.
El paro por 24 horas al que convocaron centrales sindicales opositoras al gobierno argentino rige este martes, con más de 160 cortes de rutas y calles, y alto acatamiento entre trabajadores ferroviarios y de aeropuertos.
Fue convocada por Hugo Moyano, líder del sector de la Confederación General del Trabajo (CGT), adversario de Fernández, y por Pablo Micheli, referente del sector opositor al gobierno de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA).