Un estadio olímpico que no resiste al viento |
Fuente: Agencias
(El Pueblo en Línea) ,28/03/2013-El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, pretende despejar todas las dudas sobre los problemas que afectan a uno de los estadios de los Juegos de 2016. Y es que, según las últimas pruebas, el techo del estadio Joao Havelange podría venirse abajo con vientos de 63 kilómetros por hora.
El cierre indefinido del 'Engenhao', el popular nombre de esta construcción, situada en el barrio Engenho de Dentro, fue decidido por el gobierno municipal de Rio tras un informe elaborado por la compañía alemana Schlaich Bergermann und Partner (SBP).
Según admitió un funcionario de la alcaldía, se trata de una medida "provisional" para hacer frente a un incidente "aislado". La construcción del coliseo, inaugurado en los Juegos Panamericanos de 2007, costó casi 180 millones de euros. El recinto, actualmente con capacidad para 46.000 personas, será ampliado con gradas provisionales para dar entrada a 60.000 espectadores en las pruebas de atletismo.