Un futbolista murió hoy cuando dos proyectiles de mortero lanzados por grupos armados cayeron en un complejo deportivo del distrito de Baramkeh, centro de Damasco, informaron medios de comunicación estatales.
Por su parte, los activistas reportaron fuertes enfrentamientos en varias ciudades sirias, principalmente en Damasaco y Aleppo.
El primer mortero cayó dentro del Estadio Tishreen, informó la agencia estatal de noticias SANA. El segundo se impactó contra un hotel localizado dentro del mismo complejo y causó la muerte a Youssef Suleiman, un futbolista del equipo al Wathba, el equipo local de la provincia central de Homs.
El delantero de 19 años de edad recibió el impacto del proyectil en el cuello cuando él y sus compañeros de equipo se preparaban para ir a entrenar para su próximo partido esta tarde contra el equipo al Nawaier de Hama en la cancha del Tishreen.
El partido fue aplazado después de la muerte de Suleiman, padre de un bebé de seis meses de edad.
Los medios de comunicación estatales condenaron el ataque contra la instalación deportiva, que se encuentra a un lado de las oficinas centrales del Comando Nacional del gobernante partido al Baath, que se cree era el blanco original del ataque de los grupos armados.
El área Baramke está cerca del sitio conflictivo de Kafar Souseh, donde está teniendo lugar la mayor parte de los enfrentamientos entre los rebeldes y las tropas gubernamentales.