Ruanda inició hoy una semana de actividades encaminadas a conmemorar el vigésimo aniversario del genocidio ruandés que condujo a la muerte de cerca de 800.000 víctimas tutsis.
Se guardó un minuto de silencio en todo el país, en la radio y en la televisión mientras la bandera nacional era izada a media asta.
Una "Flama de la Esperanza" que arderá hasta julio fue encendida además por el presidente Paul Kagame en el monumento conmemorativo del genocidio en Gisozi, una colina cercana a Kigali en donde se encuentran sepultados los restos de 300.000 tutsis víctimas del genocidio de 1994.
El tema de la conmemoración es "Recordar, Unir y Renovar" en honor de quienes perecieron y ofrecer consuelo a los sobrevivientes del genocidio.
El genocidio ruandés comenzó después de que el presidente ruandés Juvenal Habyarimana y el presidente de Burundi, Cyprien Ntaryamira, murieron el 6 de abril de 1994 cuando su avión fue derribado cuando se preparaba para aterrizar en Kigali.
En un lapso de 100 días, cerca de 800.000 tutsis y hutus moderados fueron asesinados.