Un total de 156 jueces chinos fallecieron en el ejercicio de sus funciones entre 2008 y 2012, según un comunicado emitido hoy miércoles por el Tribunal Popular Supremo (TPS).
La mayoría de estos jueces murieron a causa de alguna enfermedad, según el comunicado.
Desde octubre de 2006, el TPS y los departamentos pertinentes han asignado conjuntamente subvenciones a los familiares de los jueces que fallecieron mientras se encontraban en activo.