LA HABANA, 11 mar (Xinhua) -- El gobierno de Estados Unidos informó que mantendrá invariable las regulaciones para los ciudadanos cubanos que buscan visa temporal o de inmigrante, a pesar de que "acoge positivamente" los cambios del presidente Raúl Castro en política migratoria, destacó hoy el periódico "Granma".
En un hecho inusual, el cónsul general de Estados Unidos en la isla caribeña, Timothy Roche, concedió una entrevista al órgano del Partido Comunista de Cuba, en la que precisó que "las regulaciones migratorias de Estados Unidos no han cambiado y los requisitos son los mismos".
Según el texto, la entrevista, reflejada en una de las páginas centrales del rotativo, fue solicitada por la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana (Sina) con el interés de abordar los requerimientos y regulaciones para la obtención de visas estadounidenses tras la "actualización" de la política migratoria cubana.
Desde el pasado 14 de enero, los cubanos pueden viajar al extranjero sin necesidad del permiso especial llamado Tarjeta Blanca y del requisito de la carta de invitación, que fueron abolidos, y lo harán provistos con su pasaporte, la visa del país a visitar y el pasaje.
El funcionario de la Sina calificó de "bien exigentes" los trámites que deben hacer los cubanos para obtener visas estadounidenses de turismo o de inmigrantes.
De acuerdo con los pasos descritos en el diario, aquellos que aspiren a visas de turismo deben presentar planilla de solicitud, llevar pasaporte vigente y solicitar entrevista por la que deberán pagar 160 pesos cubanos convertibles (CUC), lo mismo en dólares.
En cambio, los que emigran deberán tener familiares con ciudadanía o residencia permanente en Estados Unidos y mostrar nexos de parentesco con el solicitante.
Cifras oficiales apuntan que en Estados Unidos viven 1,5 millones de cubanos y sus descendientes, cifra que equivale al 80 por ciento de la diáspora cubana.
Roche señaló que el tiempo de espera para obtener un turno de entrevista (consular para emigrantes) en la Sina es de 18 meses, y admitió que es "bien difícil" para un cubano joven obtener permiso en la Sina para viajar al país norteño como turista, pues "muchos van buscando oportunidades económicas".
Desde el año 2000 hasta el 31 de agosto del 2012, viajaron al exterior por asuntos particulares 941.953 cubanos, de los cuales no retornó un total de 120.705 personas, apenas el 12,8 por ciento, según estadísticas de la isla.
Cuba rechaza la estadounidense Ley de Ajuste Cubano, aprobada en 1966 y que privilegia a los inmigrantes ilegales cubanos a diferencia del trato que da a los inmigrantes de otros países latinoamericanos, pues los naturales de la isla que llegan a territorio norteamericano pueden quedarse, sin importar que sea por formas o vías ilegales.
En cambio, los cubanos capturados en el mar son devueltos a la isla, en virtud de la política de "pies secos/pies mojados".
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