(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – Aunque posee la comunidad china más numerosa de toda la Unión Europea (UE) y un intercambio comercial anual cercano a los 20.000 millones de euros con la segunda economía del planeta, España tiene solo una conexión aérea directa con el país asiático, Madrid-Beijing, operada por Air China. Sin embargo, esta situación podría cambiar en 2014.
El año próximo, el aeropuerto de El Prat, en Barcelona, espera tener un enlace con China, la región que más interés despierta en el Comité de Desarrollo de Rutas Aéreas (CDRA), que integran Aena, la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y la Cámara de Comercio de la ciudad, afirmó Sonia Corrochano, directora del aeródromo barcelonés.
En entrevista con EFE, Corrochano aseguró que la CDRA negocia con diversas compañías aéreas chinas para poner en marcha un enlace directo, dada la gran demanda existente para conectar sin escalas la capital catalana con el gigante asiático.
Pese a que numerosas aerolíneas chinas están interesadas en operar la ruta, Corrochano apunta a la compañía bandera de China como la de mayores posibilidades, pero recuerda al mismo tiempo que estas negociaciones suelen ser largas y es la línea aérea la que debe decidir.
Las conversaciones, dijo, se iniciaron el pasado año, por lo que, de ir todo según lo previsto, la conexión podría estar operativa en el año 2014.
El éxito de aerolíneas como Qatar Airways, que tiene ya diez frecuencias semanales con Barcelona, puede servir para que las compañías chinas se convenzan del potencial de El Prat como destino turístico y como punto de origen de un importante volumen de pasajeros que vuelan desde y hacia el Lejano Oriente a través de Emiratos Árabes Unidos o Qatar.
En los últimos seis años, el Aeropuerto de El Prat ha duplicado el número de rutas intercontinentales, pasando de 16 a 32. A ellas se sumarán este año los vuelos a Banjul (Gambia) y México, que operarán Vueling y Aeroméxico, respectivamente.
El siguiente objetivo sería entonces China, si las negociaciones llegan a buen puerto y no se produce ningún factor externo que impida la puesta en marcha de la conexión con Shanghai u otra ciudad del país, dependiendo de la aerolínea.