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En Estados Unidos los derechos humanos se deciden por el color de la piel

Actualizado a las 20/03/2020 - 18:39
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Por Zhong Sheng

Texas, 20/03/2020 (El Pueblo en Línea) -"El color de la piel ha jugado un importante papel en el destino de muchos estadounidenses". Esta es una frase de Thomas Sowell que aparece en su libro "Ethnic America: A History" (América étnica: una historia), texto que expone esa profunda frustración.

La traumática discriminación racial en Estados Unidos no se alivia con el tiempo, sino que se vuelve más severa y se arraiga en todos los aspectos sociales.

La Oficina de Información del Consejo de Estado de China publicó recientemente un informe sobre las violaciones de los derechos humanos en Estados Unidos. Mediante el manejo de abundantes datos y hechos, el documento indica que la discriminación racial -profundamente arraigada en Estados Unidos- expone la estructura política y la ideología de la supremacía blanca. Además, subraya la hipocresía estadounidense sobre los derechos humanos.

Estados Unidos sigue siendo un país de protestantes anglosajones blancos, donde todas las demás razas, grupos étnicos y comunidades religiosas y culturales tienen que soportar diversos niveles de discriminación.

Un estudio publicado en Psychological Science sugiere que los blancos con apenas cinco años de edad comienzan a percibir a los niños afroamericanos como amenazantes, asociándolos con adjetivos como "violento", "peligroso", "hostil" y "agresivo".

Casi 5 de cada 10 ciudadanos afirman que el país no ha avanzado lo suficiente hacia la igualdad racial, destacó una encuesta del Centro de Investigación Pew titulada "Razas en América 2019". Esta investigación social apunta que alrededor del 58 por ciento de los encuestados consideran las relaciones raciales en Estados Unidos como malas, y alrededor del 65 por ciento considera que en los últimos años se ha vuelto mucho más habitual que la gente exprese opiniones racistas. La encuesta, que expone el amplio y sistemático problema de la discriminación racial en Estados Unidos, demuestra que la igualdad racial es sólo una quimera en ese país.

Desde el 2016, la supremacía blanca de Estados Unidos ha resurgido, generando oposición racial y odio. Los hombres blancos que han sido los autores de tiroteos masivos y mortales han actuado bajo el mismo miedo paranoico: la extinción de la raza blanca.

El 3 de agosto del 2019, Patrick Crusius, de 21 años, condujo 650 millas hasta la ciudad fronteriza de Texas, El Paso. Dentro de un Walmart abrió fuego y masacró a 22 personas. El criminal afirmó que su asesinato era una respuesta a la invasión hispana de Texas.

El director del FBI, Christopher Wray, advirtió que la supremacía blanca es una amenaza persistente y generalizada para la seguridad estadounidense. "Estados Unidos siempre ha estado en medio de una crisis terrorista nacionalista blanca", admitió Ibram Kendi, director del Centro de Investigación y Políticas Antirracistas de la Universidad Americana.

¿Cuál es la fuente de esa tendencia tan fuerte de la supremacía blanca? Esta es una pregunta que nunca será respondida por Estados Unidos. Sin embargo, es obvio que si no supera la discriminación racial esa será su más grande pesadilla.

Cuanto más fuerte sea la tendencia, más discriminación se verificará contra las minorías étnicas de Estados Unidos. De acuerdo a un principio básico de la Carta Internacional de Derechos Humanos, todos son iguales ante la ley. Sin embargo, en Estados Unidos su aplicación va en contra de la ley misma.

Son frecuentes los tiroteos y los abusos brutales hacia los afroamericanos por parte de los policías. Además, la discriminación racial es común en las fuerzas del orden. Asimismo, son pisoteados los derechos humanos básicos de las minorías étnicas.

El relator especial de las Naciones Unidas sobre las formas contemporáneas de racismo, discriminación racial, xenofobia e intolerancia conexa señaló que las personas de ascendencia africana en Estados Unidos siguen siendo asesinadas y brutalizadas a tasas alarmantes, precisamente por las mismas autoridades encargadas de hacer cumplir la ley.

En un terrible acto de violencia policial y discriminación racial ocurrido hace un año, seis agentes de la policía dispararon a Willie McCoy, un rapero de 20 años. el joven recibidó 25 balazos en la cabeza, oreja, cuello, pecho, brazos, hombros, manos y espalda. Esto es algo que no puede ser tolerado por la conciencia humana.

¿Pero... hay realmente conciencia humana? Basta con analizar esta cifra: los adultos afroamericanos tienen 5,9 veces más probabilidades de ser encarcelados que los adultos blancos. El vestigio de la esclavitud y la segregación racial todavía se manifiesta en Estados Unidos y eclosiona en los sistemas judiciales del país, exponiendo la crueldad en la atención de las políticas y la estructura institucional del gobierno a los derechos humanos de las minorías étnicas.

Además, la discriminación racial en la economía perpetúa aún más la desigualdad social en Estados Unidos. El Centro para el Progreso Americano informó en su portal digital que, en comparación con sus homólogos blancos, los trabajadores afroamericanos se enfrentan a obstáculos sistemáticos para conseguir empleos. Y sufren tasas de desempleo más altas, menos oportunidades laborales, salarios más bajos, menores beneficios y una mayor inestabilidad laboral. La segregación ocupacional y la persistente devaluación de los trabajadores de ascendencia africana son el resultado directo de una intencionada política gubernamental.

En los últimos 40 años, esos mismos trabajadores han tenido que soportar una tasa de desempleo de casi el doble con respecto a sus homólogos blancos. Cifras de la Reserva Federal evidencian que las disparidades raciales en la riqueza han empeorado, ya que la riqueza típica de un hogar blanco es casi diez veces mayor que en una familia afroamericana. Estas diferencias están tan arraigadas que si la tendencia actual continúa, la familia promedio de ascendencia africana podría tardar más de 200 años en acumular la misma cantidad de riqueza que sus compatriotas blancos. Además, se sugiere que las minorías étnicas perciben pocas posibilidades de emancipación. Les resulta muy difícil liberarse de una dinámica tan cruel.

La separación social es una conclusión obvia en Estados Unidos, ya que el país sufre serios problemas de discriminación racial, lo que constituye una violación de los derechos humanos.

La razón por la que Estados Unidos no eliminará por completo la discriminación racial es que algunas personas que disfrutan las bondades de la supremacía blanca, gañan a la ciudadanía en beneficio propio. Desde la hegemonía y no desde la justicia, ellos adoptan su doble rasero y critican con encono las condiciones de los derechos humanos en otros países. Ese proceder es una profanación de la causa mundial de los derechos humanos.

(Zhong Sheng es un seudónimo utilizado por el Diario del Pueblo para expresar sus puntos de vista sobre política exterior.)

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