RIO DE JANEIRO, 3 sep (Xinhua) -- La Policía brasileña dispersó hoy lunes con gas lacrimógeno y aerosol de pimienta a cientos de personas que protestaban por el incendio en el Museo Nacional de Brasil, ubicado en Río de Janeiro, que destruyó miles de obras y documentos.
Los manifestantes, principalmente estudiantes, se concentraron frente a la puerta de la Quinta de Boa Vista, en la zona norte de Río de Janeiro y donde se encuentra el Museo Nacional, e intentaron entrar por la puerta principal, que estaba vigilada por guardias civiles.
Las personas afirmaron a la prensa que se quejaban por el límite de gasto público que aprobó el gobierno brasileño, que redujo los recursos para los sectores de ciencia y educación.
Tras varios momentos de tensión, autoridades optaron por abrir las puertas del recinto y la manifestación llegó hasta un segundo cordón de seguridad, frente al edificio incendiado.
El Museo Nacional, inaugurado en 1818, quedó destruido tras un incendio el domingo, todavía por causas desconocidas, poco después de que el lugar cerrara las puertas al público, a las 19:30 hora local (23:30 GMT).
El fuego destruyó prácticamente la mayoría de los objetos y documentos que había expuestos, entre ellos el del fósil humano más antiguo de América y el primer esqueleto de dinosaurio montado en Brasil.
El Museo Nacional pasaba por dificultades financieras a raíz de la crisis económica que vive Brasil.
Según la televisión Globo, la institución debería recibir cerca de 550.000 reales (135.000 dólares) anuales de la Universidad Federal de Río de Janeiro, de la que depende, pero desde hace tres años apenas recibe el 60 por ciento de ese valor.