BRASILIA, 20 mar (Xinhua) -- El Ministerio de Salud de Brasil anunció hoy martes que todo el territorio brasileño será considerado como área de recomendación para la vacuna contra la fiebre amarilla, con una ampliación gradual de las áreas de cobertura hasta abril de 2019.
De acuerdo con el ministro de Salud, Ricardo Barros, la determinación cuenta con el aval de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Sao Paulo, Río de Janeiro y Bahía, estados que ya realizan una campaña en áreas consideradas prioritarias, deberán mantener la iniciativa y extenderla a toda la población.
En estos tres estados, la inmunización se hará con dosis fraccionadas, con un quinto de inmunizante que se utiliza a la dosis integral, mientras que en los demás estados, se utilizarán dosis integrales de la vacuna.
"Es evidente que el virus amplía su espacio cada año. Tenemos dosis de vacuna para ofrecer cobertura para todo el país", afirmó Barros.
La expectativa del gobierno brasileño es que sean producidas 49 millones de dosis de vacunas en lo que resta de 2018.
Hasta abril del próximo año, 1.586 nuevos municipios estarán incluidos en el área de recomendación de la vacuna, alcanzando todo el territorio nacional.
Algunos estados de la región noreste y áreas del sur y sureste del país no eran parte de las áreas de recomendación de la vacuna, por no presentar circulación del virus.
La ampliación de la recomendación se realizó después de la entrada en funcionamiento de una nueva fábrica de vacuna de fiebre amarilla en Embu en Sao Paulo.
Según el último boletín epidemiológico, divulgado el 14 de marzo, desde mediados del año pasado murieron 300 personas en Brasil debido al brote de fiebre amarilla.
El pasado 19 de enero, la OMS consideró al estado de Sao Paulo como área de riesgo de fiebre amarilla, "considerando el aumento de la actividad del virus", y recomendó a todos los viajeros que llegan desde el exterior a ponerse la vacuna contra la enfermedad.
La fiebre amarilla es una enfermedad infecciosa febril aguda, causada por un virus, que puede llevar al individuo infectado a la muerte en cerca de una semana si no se trata rápidamente.
El virus es transmitido por la picadura de mosquitos transmisores infectados y no hay transmisión directa de una persona infectada a otra.
Hasta el momento no existe tratamiento especifico contra el virus, por lo que el personal de salud trata los síntomas y busca suplementar en lo posible cualquier falla orgánica, esperando la recuperación del paciente.