SIDNEY, 16 jul (Xinhua) -- La esposa del actor de Hollywood Johnny Depp, Amber Heard, se enfrenta a cargos en Australia por violar leyes de bioseguridad que podrían acarrear hasta 10 años de cárcel y multas por valor de 100.000 dólares australianos (74.000 dólares estadounidenses), por introducir ilegalmente a sus perros mascota en el país.
Los yorkshire terrier, Pistol y Boo, llenaron titulares internacionales cuando se descubrió que habían sido introducidos de manera ilegal en el país a bordo de un jet privado por Heard, que había acudido a visitar a Depp durante la grabación de la última película Piratas del Caribe en la Gold Coast australiana.
El ministro de Agricultura, Barnaby Joyce, amenazó con sacrificar a los perros si no eran trasladados inmediatamente de vuelta a EEUU.
El episodio hizo de Australia un hazmerreír internacional, pero el país se toma muy en serio sus leyes de cuarentena.
El asunto volvió a saltar a la palestra el martes cuando se informó de que la actriz Heard ha sido acusada con dos cargos de infracción de bioseguridad, y tendrá que presentarse ante un tribunal de Queensland en septiembre.
El director de la Fiscalía Pública de la Commonwealth ha emitido un emplazamiento para Heard.
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